EL SALVADOR. «¡Ay, ay, mi brazo! ¡Ay, Dios mío! Ten misericordia, Diosito», son las palabras de un reo que está tendido en el suelo, bocabajo, con las manos esposadas, mientras un policía oprime su rostro con su pie.
Eso es lo que muestra un video de unos 53 segundos de duración que se publicó en la cuenta oficial de Twitter de la Policía Nacional Civil de El Salvador (PNC) y luego fue eliminado.
En el video se logra apreciar cómo los pandilleros y mareros presos son torturados, en similares condiciones al caso antes descrito.
Según medios locales, el video alcanzó 40 likes, 16 retuits y 4 comentarios antes de ser eliminado. Iba acompañado por este mensaje: «A todos los terroristas que matan y cometan crímenes contra el pueblo salvadoreño, van a sufrir las consecuencias. #GuerraContraPandillas».
Al final del video, mientras uno de los torturados se queja por la manera en que le doblan los brazos, esposados a sus espaldas, este le señala a su captor que «se acoplarán» a todo lo que les digan.
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«Ustedes mandan jefe… ¡Ay! ¡Ustedes mandan, jefecito! Nos acoplamos a todo lo que ustedes digan. Cero novedades, ¡ay!”, grita el sujeto, mientras una bota le presiona la cara contra la tierra.
VEA EL VÍDEO:
Medidas aprobadas por El Salvador para combatir las pandillas
Bukele defendió el martes las medidas aprobadas por la Asamblea Legislativa -de mayoría oficialista- destinadas a sancionar a los medios y periodistas que reproduzcan mensajes de las llamadas maras.
Las polémicas reformas también incluyen la prohibición de grafitis alusivos a las pandillas y la incautación y uso posterior de bienes y armas para combatirlas.
Bukele además amenazó con dejar morir de hambre a los pandilleros presos si en la calle sus grupos comienzan a «vengarse» por el régimen de excepción declarado tras una escalada de asesinatos que ya ha cobrado más de 80 víctimas mortales y ha provocado la detención de más de 6.000 pandilleros, según el gobierno.
«Y no me importa lo que digan los organismos internacionales», agregó el mandatario durante un acto de graduación de un nuevo contingente de policías y soldados.
«Que vengan a llevarse a estos pandilleros si tanto los quieren. Se los entregamos todos, al dos por uno».
El presidente salvadoreño también ha solicitado la construcción de un nuevo centro penitenciario de máxima seguridad para 20.000 presos, que se convertiría en el más grande del país.
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