«¡Queremos trabajar, queremos trabajar!», de esta forma los vendedores ambulantes del Paseo Liquidámbar de Tegucigalpa están solicitando que las autoridades de la alcaldía que les permitan realizar sus ventas en el casco histórico de la ciudad.
La Alcaldía Municipal del Distrito Central, para evitar aglomeraciones y congestión, les concedió un permiso para vender en los alrededores del lugar. Sin embargo, los comerciantes piden ubicarse también en esta concurrida zona ya que es «temporada alta de ventas».
«Le hemos solicitado al regidor de la alcaldía, Juan Carlos García, que nos haga el favor para estos últimos 15 o 20 días», manifestó una comerciante de la zona.
Otro de los comerciantes explicó que realizaron la petición en las primeras horas del día, pero siguen sin recibir respuesta.
«No nos han contestado la petición que hicimos en la mañana. Aquí vamos a tomar decisiones drásticas«, advirtió.
Los mercaderes dijeron que de no recibir una respuesta pronto «mañana nos vamos a tomar el casco histórico«, alertaron.
Medidas de bioseguridad
Los vendedores informaron que no habrá problemas con el COVID-19 ya que cuentan con todas las medidas de seguridad para poder atender a los compradores.
«Cada vendedor y compañero tiene su gel, su spray con alcohol y tenemos bombas para fumigar y desinfectar los puestos. Nosotros desinfectamos las cosas antes de venderlas también», explicaron.
Asimismo, invitaron a las autoridades a observar e inspeccionar los sitios de comercio para que verifiquen que sí se están cumpliendo las medidas.
Deudas
Una comerciante manifestó que tienen deudas con la banca y la única forma de cumplir con este déficit es que se les permita estar en la zona más congestionada del casco histórico.
«Nosotros sacamos préstamos con 20% de intereses y queremos que nos ayuden. Estamos en etapa de Navidad y es la época donde más aprovechamos».
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