HONDURAS. El equipo legal que defiende al hondureño Juan Antonio «Tony» Hernández Alvarado volvió a solicitar la postergación de la lectura de su sentencia en Estados Unidos, según se informó en los últimos minutos.
El abogado Peter Brill envió este miércoles una carta al juez Kevin Castell. En la misma, pidió un nuevo aplazamiento para la audiencia en la que el compatriota sabrá el tiempo que permanecerá recluido.
Hasta el momento, ese encuentro para el dictamen condenatorio está fijado para el 16 de septiembre del año en curso.
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Falta de contacto por COVID-19
Cabe decir que el legista pretende escudar a su cliente con la emergencia mundial de COVID-19. Argumentó que, debido a la pandemia, no ha tenido la comunicación y tiempo necesario para preparar el documentado denominado «sentencing submission«.
El término anterior se refiere en inglés al documento oficial en que la defensa presenta la información que creen necesaria para que el juez tome en cuenta al momento de determinar qué tan larga será la sentencia.
Además, Brill expuso que sólo ha tenido contacto con Hernández mediante video y teléfono. En ese sentido, comentó que han utilizado un intérprete (traductor), pero aún les es difícil establecer una comunicación eficaz.
Por tanto, también plasmó en la misiva presentada a Castell que debe al menos reunirse una vez con «Tony» en persona previo a su sentencia. Eso nada más estaría sujeto a que la crisis de salud empeore al punto de que sea imposible el contacto en un futuro previsible.
En virtud de esa consideración Brill solicitó, de manera específica, que el aplazamiento perdure hasta octubre o noviembre, con la exactitud a criterio de la corte.
Es oportuno tener en cuenta que no es la primera vez que la defensa busca posponer la audiencia; ya lo logró con anterioridad. Inicialmente, el imputado debía conocer el dictamen del juez desde enero de 2020.
Cargos
Es importante recordar que, tras el proceso de enjuiciamiento, el jurado declaró culpable al hermano del mandatario Juan Orlando Hernández por la comisión de cuatro delitos:
- Conspirar para importar cocaína hacia los Estados Unidos: este delito contempla una pena mínima obligatoria de 10 años de prisión y una pena máxima de cárcel de por vida, es decir, cadena perpetua.
2. Posesión de armas y dispositivos destructivos: por este segundo delito, «Tony» podría purgar una pena mínima de 30 años de prisión y una máxima de cadena perpetua.
3. Conspiración para usar y portar ametralladoras y dispositivos destructivos: Solo contempla la cadena perpetua.
4. Falso testimonio brindado a agentes de la DEA: cinco años de reclusión podría enfrenar por este último delito.
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