Redacción. Un privado de libertad falleció el pasado sábado en la Penitenciaría Nacional de Támara, en Francisco Morazán, presuntamente tras ser envenenado, denunciaron sus familiares.
Eduardo José Matute (de 24 años), es el nombre de la persona muerta, la cual cumplía una condena en el centro penal por un delito que no se especificó.
La familia de Matute dijo que cuando se les dijo que su ser querido estaba muerto, les afirmaron que se trató de un envenenamiento, pero no les dieron mayores detalles.
En ese sentido, mientras retiraban el cuerpo del reo de Medicina Forense en Tegucigalpa, solicitaron que hagan una investigación.
El portavoz de las Fuerzas Armadas (FFAA), José Coello, expresó que ya investigan lo sucedido con el privado de libertad, para posteriormente emitir un informe y aclarar el motivo de la muerte.
Por los momentos se desconoce si el hombre murió por un envenenamiento accidental o si hubo mano criminal en su deceso, pero serán las autoridades penitenciarias y de seguridad que confirmen o descarten esas hipótesis.
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Siguen prófugos dos privados de libertad de alta peligrosidad que escaparon de la cárcel de Támara
Autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP), informaron de la fuga de dos privados de libertad del centro penal de Támara.
Pese a que se desconocen mayores detalles de la forma en la que los dos sujetos abandonaron de manera ilegal el recinto penal, se ha dado a conocer que siguen prófugos.
Ambos se habrían fugado del módulo de máxima seguridad de Támara y se les considera como personas de «alta peligrosidad».
De acuerdo al reporte, ellos responden a los nombres de:
- Yensi Frederick Madrid Morataya, originario de La Lima Cortés y quien ingresó a Támara el 12 de noviembre del 2019. Él estaría cumpliendo una pena por encontrarlo el delito de evasión.
- Gandhi Espinal Raudales, originario de Tegucigalpa y quien ingresó al recinto penitenciario el 12 de enero del 2010. Sobre él, quien además era campeón de judo, recayó una acusación por el homicidio de 5 personas, robo, evasión, asociación ilícita, robo agravado y portación ilegal de armas.
Ante esta situación, las autoridades penitencias instan a la población hondureña a estar atenta sobre estos dos sujetos y en caso de verlos, informar de inmediato a las líneas de emergencia y así proceder con su recaptura.