Guaimaca, Honduras.- Decenas de personas le dieron el último adiós al pequeño Jeremy Zúniga; el niño de 10 años ultimado a machetazos ayer en Guaimaca, Francisco Morazán.
Los restos del menor fueron velados la madrugada de este martes y luego celebraron la misa de cuerpo presente. Al funeral le llevaron flores y le cantaron con evidente tristeza, pues el pequeño era muy querido en la zona.
Las personas describieron a Zúniga como un niño «tranquilo» y «dinámico», que «se dio a querer» con la gente que lo conocía. Consecuentemente, a eso de las 4:00 de la tarde, se procedió a darle cristiana sepultura en un cementerio local.
Sentimiento colectivo
Por su parte, los familiares, amigos y compañeros de la escuela República de México lamentaron el horrible crimen que le arrebató la vida al pequeño. «¡Ay, Señor, me duele verlo así… Me duele, Jeremy, papi, levantate, bebé!», gritaban sus familiares desgarrados ante el triste hecho de tener que despedirse del niño para siempre.
Los vecinos de la aldea El Ocote que estaban acompañando a la familia en su dolor, miraban el cuadro con impotencia y se solidarizaron con los dolientes.
Por otra parte, la multitudinaria población a parte de sumarse al dolor de la familia, se pronunció para exigirle a las autoridades justicia por el asesinato del menor.
Crimen
El asesinato del menor ocurrió el pasado lunes, 7 de noviembre, en el municipio de Guaimaca, Francisco Morazán. Las autoridades detuvieron en su momento a Roger Gálvez Marcías, a quien suponen responsable de haber matado al menor con un machete por negarle un jugo.
El cuerpo del niño quedó tirado en plena calle, en medio de un charco de sangre. Según la información preliminar, lo mataron tras salir del centro educativo donde estudiaba y fueron los profesores quienes hallaron su cuerpo.
Detención judicial
En cuanto al requerido, el juzgado penal de Talanga le dictó detención judicial este día. Después del dictamen los agentes policiales lo trasladaron al centro penal de Siria, El Porvenir, mientras llega la próxima audiencia.
En ese sentido, el poder judicial detalló que se programó una audiencia inicial para el 11 de noviembre, a las 11:00 de la mañana.
Por ende, las partes quedaron debidamente convocadas para el desarrollo de la audiencia en la que se presume se podría dictar un auto de formal procesamiento con cualquiera de las medidas, o un sobreseimiento que podría ser definitivo o provisional.
