Estados Unidos.- En las últimas semanas, las franquicias de la NBA han estado expectantes al futuro del dos veces MVP de la liga, Giannis Antetokounmpo.
Al griego sólo le quedaba un año de contrato con los Milwaukee Bucks. Esta situación hizo que muchos equipos trabajaran en la confección de sus plantillas para esta temporada, pensando en mantener un amplio espacio salarial para 2021, año en el que Giannis saldría al mercado de agentes libres.
Los Bucks renuevan a su estrella
Sin embargo, los planes de muchos equipos que se frotaban las manos con la posibilidad de fichar a este ala-pívot, fueron truncados por el anuncio oficial de la franquicia de Wisconsin.
Con bombos y platillos, los Bucks confirmaron la extensión de su jugador referente, que permanecerá en la franquicia durante los próximos 5 años, a cambio de 228 millones de dólares.
De esta forma, Antetokounmpo se convirtió en el jugador mejor pagado de la NBA, firmando la extensión de contrato más onerosa en la historia de la liga. Un jugoso salario que se ha ganado a pulso con su rendimiento en las últimas dos temporadas, siendo uno de los jugadores más dominantes en la duela.
«Esta es mi casa, Esta es mi ciudad. Tengo la suerte de poder ser parte de los Milwaukee Bucks por los próximos 5 años. Hagamos que este tiempo valga la pena. El espectáculo continúa, vamos a hacerlo», escribió Giannis en su cuenta oficial de Twitter, tras confirmarse la noticia.
Así se puso fin a uno de los temas de actualidad más intrigantes en la NBA, pues Milwaukee consiguió ampliar la estadía de su estrella antes del 21 de diciembre, fecha en la que expiraba el plazo para que Antetokounmpo pudiese firmar el contrato.
Antetokounmpo se queda en el Este
Al no ser el estado de Wisconsin un mercado tan apetecible para las grandes estrellas, era trascendental en las aspiraciones futuras de los Bucks, concretar la extensión del griego, que viene de firmar su mejor temporada en la liga. El último año, promedió 29,5 puntos, 13,6 rebotes y 5,6 asistencias.
Además, es el tercer jugador en la historia de la NBA, capaz de ganar los premios al jugador más valioso y mejor defensor en la misma campaña. Un récord que sólo pueden presumir figuras con el calibre de Hakeem Olajuwon y Michael Jordan.
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