Honduras. Johny Alexander Chávez, el hombre de 38 años que ayer hizo un tiroteo en el Hospital Mario Catarino Rivas, fue remitido a un hospital psiquiátrico por orden de un juez.
La decisión fue tomada luego de que la defensa y la Fiscalía hicieran esa petición. Esto, porque el imputado por el delito de lesiones y tentativa de robo, no está «en condición estable de su salud mental», según indicó un dictamen forense.
El vocero del Ministerio Público, Elvis Guzmán, explicó que a Chávez no se le acusó de tentativa de homicidio -aunque era el señalamiento inicial- porque determinaron que «no tenía intenciones de provocar daños mayores». Esto, porque tras quitarle el arma a un guardia disparó sin punto fijo.
Sin embargo, su acción provocó que tres personas resultaran heridas: dos guardias de seguridad y una señora que estaba afuera de Emergencia.
Es por eso, que las autoridades consensuaron que «en el centro psiquiátrico (el ciudadano) será sometido a una evaluación profunda. Luego el informe será remitido al juez para determinar el grado de salud mental de este individuo», mencionó el portavoz.
El imputado estaba internado
Cabe recordar que ayer, el sujeto fue capturado por la Policía Nacional. Hasta el momento sólo manejan varias hipótesis sobre la causa que lo llevó a disparar. Fue llevado a la primera estación de Policía para que luego respondiera ante el Ministerio Público (MP).
Datos brindados posteriormente, indicaron que Johny Alexander Chávez fue ingresado al Catarino Rivas el pasado 2 de enero. La razón fue un problema en su ojo derecho que le provocó un accidente de tránsito ocurrido en El Progreso, Yoro. Por lo que fue operado.
Por los tanto, los parientes explicaron que el ciudadano es padre de tres hijos y se dedica al oficio de comerciante en el departamento antes mencionado.
También explicaron que el comportamiento del hombre cambió después de que fue ingresado al Hospital. Aseguran que ya había estado caminando en esas instalaciones sin ropa y gritando.