CORTÉS, HONDURAS. En la Casa Hogar de Niños Buen Samaritano se encuentran preocupadas, pues pese a la labor que realizan, están atravesando duros momentos.
Se conoció que esta fundación tiene una deuda con la Empresa de Energía Honduras (EEH) de mas de cinco millones de lempiras.
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Ante ello, han pedido la condonación de esta deuda, pero la Secretaría de Estado en los Despachos de Finanzas (SEFIN) ha negado esta petición.
De igual forma, se reveló que el congresista José Jaar, presentó ante el Congreso Nacional (CN) una moción que determinaba perdonar esta deuda millonaria y que esta casa hogar quede exenta de pagos públicos.
No obstante, esta medida también fue denegada, pues SEFIN les indicó que no había dinero para poder hacerlo posible.
«Esta Casa Hogar no cuenta con ningún recurso económico, dependemos 100 % de las donaciones. En SEFIN dijeron que no hay un renglón presupuestario, que no había dinero. Pero yo estoy seguro que se puede resolver», precisó José Jaar.
La Casa Hogar El Buen Samaritano es coordinada por Hermanas de la Obra de Jesús.
Ellas ayudan a los más necesitados. Además, ofrecen un lugar digno donde vivir a los pacientes olvidados y abandonados por sus familiares.
También, brindan apoyo a las personas que tienen discapacidades físicas, motora, psíquica, neurológica, hidrocefalia, entre otros y depende de la Diócesis de San Pedro Sula.
«Es muy sofocante, estamos siempre en tensión de que en cualquier momento nos vienen a cortar la energía, porque es una deuda muy grande y no podemos pagar», mencionó una de las hermanas.
Por ahora, se desconoce lo que ocurrirá con este sitio, sin embargo, las hermanas han señalado que seguirán con la labor hasta el último momento.
Iglesia denuncia que en Honduras no dejan ayudar a los migrantes
Miembros de la «Iglesia en las calles», en Tegucigalpa, han expresado desde el 21 de noviembre que agentes de Transporte, no les están permitiendo movilizar a migrantes a su albergue.
Los feligreses comentaron que ellos tienen un albergue dentro del local que usan como iglesia. El lugar lo usan para cuidar a migrantes que buscan lograr el “sueño americano” .
Sin embargo, ese gesto se ha visto truncado por varios agentes de Transporte, quienes solo los detienen para impedir que ayuden a los extranjeros.