TEGUCIGALPA, HONDURAS. Aunque se siente «demasiado bien», Sor María Rosa Leggol, lideresa católica en Honduras, confirmó este sábado que contrajo la COVID-19.
La Sociedad Amigos de los Niños (SAN), fundación altruista que creó Rosa, compartió un pronunciamiento al respecto. Se detalló que ella recibió el resultado de su prueba PCR ayer, viernes, y la misma salió positiva.
Luego de que se conoció su diagnóstico, se le remitió a la atención de un grupo de médicos. Ese equipo le realizó un examen físico completo y demás estudios; se concluyó que sus signos vitales y el comportamiento de sus órganos están bajo la normalidad.
Por tanto, pese a que trascendió que estaba delicada, su actual cuadro clínico es estable. Sin embargo, se aclaró que Sor María sí aqueja algunos achaques de salud producto de su longeva edad y otras enfermedades preexistentes. Tiene 93 años, nació en Puerto Cortés.
Sor María ya suma 71 años dedicada al servicio religioso. En ese tiempo también desarrolló un sinnúmero de actividades en favor de los más necesitados y vulnerables. Además de la SAN, también forjó el proyecto Aldeas de Niños SOS, entre otras iniciativas.
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Sor María envía mensaje
Desde la cama donde recibe cuidados médicos, la destacada franciscana envió un mensaje a la población. Agradeció a quienes están al tanto de su condición y aseguró que no podría sentirse mejor; asimismo, aseveró que confía en Dios para su recuperación.
«Muchas gracias por preocuparse y estar pendiente de mi salud. iMe siento demasiado bien, a veces me cuesta creer que tengo el virus! Estoy segura de que nuestro Señor está acá a mi lado, sentadito dentro de mi corazón. Tengo la certeza que él también está al lado de todos y cada uno de ustedes», comenzó diciendo.
De igual forma, destinó algunas palabras de esperanza en medio de la crisis sanitaria. Exhortó a que prevalezca la expectativa segura de un futuro mejor, ante todo.
«No perdamos nunca nuestra fe, jamás está de más una oración hecha con amor y con esperanza, así que sigamos rezando todos por la recuperación de los enfermos, por nuestro país, por el mundo entero, que atraviesa momentos tan difíciles por esta pandemia», expresó.
Por último, agradeció nuevamente a quienes, de una manera u otra, le han enviado mucho cariño y apoyo. Instó a la gente a que no se cansen de cuidarse y atender a los demás ante la emergencia de COVID-19.
«Esto pasará, pero solo juntos podemos lograrlo. ¡Dios y la Virgen bendigan sus hogares, su trabajo y su vida!», concluyó Sor María Rosa.
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