Uno de los autos que sin tantos aspavientos se convirtió en todo un icono, es el smart, que desde su debut se colocó como un auto sumamente peculiar por su diseño y tamaño.
Considerando estos dos aspectos, en especial sus compactas dimensiones, un taller de tuning decidió transformar al smart en todo un Monster Truck.
Gracias a Gotham Garage, paradójicamente un smart pasó de ser un mini city car a un corpulento auto capaz de rodar por cualquier terreno que se e interponga.
En este proyecto, el tuner tomó a un smart Fortwo para dejarlo casi irreconocible con una serie de adecuaciones y modificaciones.
Dentro de los cambios destacan las llantas todoterreno de 30 pulgadas, los rines de acero de 15 pulgadas y la suspensión de alto desempeño con un sistema de ajuste.
Buscando acomodar las llantas de mayor tamaño, la carrocería ve recortadas las salpicaderas y la incorporación de molduras, específicamente en las ruedas traseras.
Este smart también ve la incorporación de placas protectoras, una jaula de seguridad exterior, un portaequipajes, luces LED y equipo de rescate de vehículos.
Adentro, la cabina se mantiene prácticamente igual, excepto por el sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil de 8 pulgadas.
Donde no hay cambio alguno es en el motor que mantiene el tres cilindros productor de 70 hp, con tracción únicamente en las ruedas traseras combinado con una transmisión automática secuencial de cinco velocidades.
Otro tuning
El preparador alemán Brabus está adaptándose muy bien a las nuevas tecnologías y la electrificación definitivamente no será impedimento para continuar desarrollando sus radicales proyectos y este Smart EQ ForTwo Cabrio, bautizado como Brabus 92R, es una clara muestra de ello.
¿Qué cambia?
Este pequeño eléctrico alemán ha pasado por la manos de Brabus y ha recibido su respectiva dosis de tuning. El apartado estético exterior muestra una evidente modificación, un kit de carrocería completo que otorga al frente, una fascia con una toma de aire mucho más prominente y un labio color rojo que hace match con el estribo lateral del mismo color y el terminado del difusor trasero, que a su vez otorga mayor rendimiento aerodinámico. Los rines por supuesto también son propios de la versión y tienen un diámetro de 16” y 17”.
El interior evidentemente también está mejorado. Predominan los detalles en color rojo en varias partes del habitáculo. Los asientos son clara muestra de ello, además de tener grabado el logo de Brabus en la cabecera de los mismos y una pequeña placa con un grabado que hace alusión al número de unidades que serán fabricadas, 50 solamente.
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