TEGUCIGALPA. Tras un peritaje realizado en el epicentro del incendio suscitado en Guanaja, el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) confirmó que lo que ocasionó el voraz incendio en la isla, fue una vela.
Fue mediante un comunicado que se confirmó que fue una vela la que causó el devastador incendio que ha dejado al borde de la quiebra a la isla caribeña.
Según los reportes de las autoridades, el siniestro provocó que más de 136 viviendas resultaran severamente dañadas y que al menos unas 600 familias quedaran prácticamente en la calle.
El informe
De acuerdo al comunicado lanzado por Sinager, el incendio comenzó el sábado 2 de octubre a las 2 de la madrugada, el cual fue detonado por una vela que estaba en una de las viviendas del barrio Punta Caliente, sector de Cayo Bonnaca, en el municipio de Guanaja.
Entre las hipótesis que se manejaba sobre la causante del incendio, se decía que el siniestro fue por culpa de un drogadicto, quien por estar preparando sus drogas, le había dado vuelta a una vela, la cual cayó al piso y a los minutos empezaría el incendio, cuando el presunto drogadicto se dio cuenta, huyó del lugar sin decirle a nadie, dejando que el incendio creciera sin control.
El comunicado también menciona que cuando el incendio estaba consumiendo varias casas, llegó personal de la Oficina Técnica de Prevención y Seguridad Contra Incendios (OTPSCI), junto al Cuerpo de Bomberos de Roatán para tratar de parar el voraz incendio.
Los daños
El arquitecto Dino Rietti hizo una estimación evaluando los daños sufridos en el Cayo Bonacca en Guanaja, lo cual costará alrededor de 10 millones de dólares (241 millones de lempiras).
Cerca de trescientas casas resultaron dañadas en Guanaja a raíz del incendio, esto equivale a un aproximado de una tercera parte del cayo, según Rietti.
Es por ello que se necesita la pronta reconstrucción del cayo, ya que peligra que la zona se vuelva inhabitable, aseguran expertos.
«Se necesita avalar estos procesos rápidos, al menos en 2 meses, porque si no, el cayo va a agarrar una característica de ciudad abandonada», expresó Rietti.
Los daños a la zona fueron catastróficos debido a que el cayo no cuenta con un sistema de prevención de incendios, aseguran consultados.
«Apenas se va a comenzar a diseñar, por eso es que en los planes de emergencia las personas dicen que se roban el dinero», dijo.
Asimismo mencionó que, debido a que las personas desconfían sobre el manejo de los fondos públicos, es necesario agilizar los procesos.
«Se licita el diseño, luego se licita la obra y después la supervención y en eso, ya se pierden como seis meses», agregó.
Ayuda externa
«Sin ayuda externa, Honduras lo más que va a poner es un poquito de dinero, va a empezar poniendo solo 20 millones de lempiras y se ocupan doscientos cuarenta millones», aseveró el arquitecto.
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Rietti amplió que Honduras ocupa pedir ayuda a organismos externos, con los cuales se sostengan tratados internacionales de cooperación, para efectuar la reconstrucción en Guanaja.
Los daños en el Cayo Bonacca fueron aproximadamente de un tercio de la isla, según estadísticas.
El comunicado
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