TEGUCIGALPA, HONDURAS. El país ha estado bajo confinamiento por más de siete meses, desde que se detectó el primer caso de COVID-19. A raíz de ello, se suscitaron varios cambios. Uno de ellos, fue la restricción de visitas a los reclusos en la mayoría de centros penitenciarios a nivel nacional.
Según lo han planteado familiares de los reclusos, el próximo 13 de diciembre, estarían cumpliendo 10 meses de no poder verlos. Pues, las autoridades no permiten visitas de ningún índole a los establecimientos carcelarios.
A consecuencia de ello, familiares durante dicho lapso, realizaron tres protestas con la finalidad de obtener respuesta o mínimo, ser escuchados.
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Delma Ordoñez, presidenta de la Asociación de Familiares de Privados de Libertad, explicó a Diario TIEMPO, que conocen la situación que atraviesa el país respecto a la enfermedad por coronavirus, pero que sus visitas cumplirían con los protocolos requeridos.
«Estamos pidiendo visitas y respetando las medidas de bioseguridad que impongan las autoridades, ya son casi diez meses sin ver a nuestros familiares y está abierto casi todo, ya no hay restricciones», señaló.
Solicitan visitas para navidad
«Estamos esperando de que nos den una respuesta positiva al menos en navidad, que por lo menos en diciembre los familiares puedan ir a ver a sus privados de libertad y de igual forma, los privados a sus familiares», dijo.
A su vez, Ordoñez explicó que a raíz de la afectación de Eta e Iota en el país, los privados de libertad también están preocupados por sus familiares y desconocen su condición en este momento, razón por la que piden a las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP), que quiten las medidas de restricción de visitas.
Por otra parte, ella señaló que no han obtenido respuesta a pesar que las autoridades del INP se hayan reunido con autoridades de Salud. Esto, para tocar el tema de contagios de COVID-19 en los centros penitenciarios.
«Han tenido infinidad de reuniones las autoridades del INP y del CONAPREV (Comite Nacional de Prevención Contra la Tortura, Tratos Crueles, Inhumanos o Degradantes), la Secretaría de Seguridad y la Región Metropolitana, para elaborar un protocolo y hacer un pilotaje en el Centro Penal de Támara«, sostuvo.
Petición a las autoridades
Hasta el momento, no hay respuesta, ni siquiera los abogados tienen acceso a ver a los privados de libertad; pese a que, autoridades han mencionado que la COVID-19 está controlada en un 98 % en las cárceles hondureñas, indicaron.
Ante ello, la presidenta de la Asociación solicita que:
- Se permitan nuevamente las visitas
- Asimismo, que se instalen y entren en funcionamiento los teléfonos públicos, para que los reos tengan acceso a llamadas; no importa si son controladas, pero que logren contactar a su familia.
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