TEGUCIGALPA, HONDURAS. Las películas, las canciones y los textos en los que la intensidad es pieza clave nos han hecho una mala jugada normalizando las relaciones afectivas poco sanas. Esa es la razón por la que cuando una persona llega a nuestras vidas y altera nuestra estabilidad mental, emocional y física, lo vinculamos con amor, ¿será?
El amor no es sinónimo de caos, podemos confundirnos por la manera en que las hormonas se desequilibran cuando el enamoramiento se hace presente. Pero después, ¿qué sigue?
La obsesión no es bonita, se puede convertir en la experiencia más trágica de tu vida. Saber que alguien es capaz de hacer lo peor con tal de tenerte, es realmente aterrador.
Es obsesión no amor
El problema es cuando hay una línea muy delgada entre amor y obsesión, al menos
eso creemos cuando salimos de la realidad. Porque cuando la persona obsesionada
tiene algo de bueno, nos aferramos y no queremos soltar. Es ahí donde nos
convertimos en expertas, maquillando su mal comportamiento y queriendo creer que
todo está bien. Presta atención a estas señales:
Información que no le habías dicho
¿Extraño? Para que una persona sepa cosas realmente privadas de tu vida, sin que
antes se lo hayas contado es porque desde el principio se obsesionó con tu persona.
Esa es la primera bandera roja, no necesitas ser un experto para darte cuenta que
algo no anda bien. Es normal que nos interese saber sobre la vida de una persona que
nos guste, pero sumergirnos en detalles es preocupante.
Intimida al resto
Sin duda, los chicos malos se han ganado un lugar popular en el corazón de muchas.
Y es que vinculamos sus momentos de arrebato con valentía, con esa persona que
hará lo que sea para defenderte. No obstante, el hecho de que sienta la necesidad de
alejar a todos de ti es indicador de que quiere controlarte. Siempre tiene algo en
contra de tus amigos y familiares.
Se aparece de la nada
A veces, la vida juega con nuestros destinos y en el momento menos esperado hace
que se encuentren. De vez en cuando es válido, pero cuando se aparece en todos los
lugares que frecuentas es sinónimo de acoso. La obsesión es clara, quiere verte y
vigilar todo lo que haces, porque no soporta la cercanía que tienes con el resto de
las personas.
No acepta un no
Es claro que cuando le gustas a una persona es muy normal que sienta el deseo de
estar contigo, pero eso no significa que todo el tiempo estés a su disposición. No es
normal que se moleste cuando rechazas una invitación, exigiendo que canceles tus
planes o que simplemente se ponga en el rol de víctima, para que cedas ante lo que
quiere.
No podrás seguir sin él
Uno de los argumentos más usados por los manipuladores y los que están
obsesionados con una persona. Su deseo es convertirse en alguien indispensable, no
quiere que concibas la vida sin él y quiere dejarte claro que es lo mejor que te va a
pasar. Además de decir que te ama como nadie. Ahí es cuando todo se puede volver peligroso y lo mejor es buscar ayuda.
Fuente: Psicología y Mente
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