REDACCIÓN.- La reconocida presentadora de la televisión, Sarai Espinal, respondió en las últimas horas a las críticas que hicieron por un video donde aparece su pequeña hija, Luciana, descalza y con sus pies totalmente sucios.
A través de sus historias en su cuenta oficial de Instagram, la popularmente conocida como «La reina del lempira», expuso el motivo del por qué su primogénita llevaba los pies llenos de mugre.
Para entrar en contexto se debe precisar que todo inició cuando Sarai subió un video a esa misma red social, donde se observa a su hija gateando, sin zapatos y con la plantas de sus pies de color negro.
«Revolviéndole todo a doña Deysi ella, miren esas patitas ve», dijo la presentadora en su video.
En tal sentido, los comentarios de los internautas y seguidores de la también periodista no se hicieron esperar, quienes comenzaron a criticarla por la grabación de su hija. Sin embargo, ella salió al paso y contestó los señalamientos que realizaron sus detractores.
«Para la gente que está ya criticándome, Luciana anduvo caminando y jugando en una acera, siguiendo una gata y luego entramos donde una amiga y ahí mostré el video de que ella andaba agarrando todos los adornos y andaba sucios sus pies. Si mi casa estuviera sucia o mantuviera sucia a mi hija, jamás nadie en su sano juicio va a mostrar cosas feas de uno mismo», escribió Espinal en su defensa.
En otra publicación, la conductora de televisión escribió: «Nos han mandado tantos piececitos sucios para chocarlos con Luciana. Qué vivan los niños, awww como recuerdo mi niñez con Luciana».
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Luciana cumplió su primer año en noviembre
Recientemente, la periodista hondureña rompió en llanto, tras contar sobre las complicaciones que tuvo para dar a luz a su pequeña hija, quien ya cumplió su primer año de vida.
«Estoy feliz porque hoy mi hija cumple su primer añito, bueno, solo las madres me van a entender la felicidad que tengo», expresó.
A su vez, Espinal contó que la felicidad tan grande se debe a que después de haber presentado varias complicaciones, su bebé vino al mundo. En ese momento, su tono de voz cambió, pues le conmovió recordarlo.
«Tengo felicidad porque después de tres amenazas de aborto, la pérdida de un bebé y el día que iba a parir casi se me muere, gracias a Dios mi pequeña está hoy cumpliendo un añito», manifestó con un nudo en su garganta.
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