DE MUJERES. Seguro que has escuchado un sinfín de veces que el uso del rizador de pestañas no es bueno para éstas, ya que lo que puede provocar es que se rompan o dañen.
Tienes que saber es que, como todo en la vida, abusar de algo no es bueno. Por ello, el rizador es una herramienta que, usándolo de vez en cuando puede ser un buen aliado para alargar y dar forma a tus pestañas sin la necesidad de aplicar máscara. Es el accesorio perfecto para conseguir unos ojos más grandes, pero hay que tener cuidado y saber cómo usarlo, por lo que es importantes que sigas los consejos de los expertos.
Riesgos al utilizar el rizador de pestañas todos los días
Cuando utilizamos el tipo de rizador que amerita calor y químicos, al igual que cuando realizamos un procedimiento de este tipo en nuestro cabello, los días posteriores pueden presentarse algunos efectos secundarios como irritación o sensibilidad, incluso una reacción alérgica.
Además, la constante presión lastima las pestañas en tres zonas, raíz, mitad y punta que es la manera en la que se aplica el uso del rizador. También existe la posibilidad de que te pellizques la piel al tratar de hacerlo más rápido.
Si lo aplicas en la manera indebida y aplicas mayor cantidad de fuerza se te puede marcar la esquina del rizador haciendo parecer tus pestañas cuadradas.
Existe la práctica de calentar el rizador con un secador de cabello para intensificar el efecto, esto debilitara y maltratara las pestañas. Si aplicas primero la máscara podrías partirlas ya que las pestañas estarán secas y rígidas.
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Consejos para el buen uso del rizador de pestañas
Si tú también eres fan del resultado que deja el uso del rizador de pestañas, pero tienes miedo de que las deteriore, toma nota de los tips que dan los maquilladores Moises Freire y WIld Van Dijk, responsables de los looks de muchas celebridades.
Lo primero que debes saber es que el rizador debe usarse siempre sobre las pestañas al natural, desnudas y sin nada de maquillaje. «Así evitarás que se te queden pegadas o que se rompan», explica Freire añadiendo que: «Para emplearlo correctamente, tienes que colocarlo recto en la raíz de las pestañas, apretar con cuidado y mantenerlo presionado tirando muy levemente hacia arriba».
Según Moisés, lo más recomendable es hacerlo durante unos 10 segundos. «Apretar un poco es más que suficiente» para conseguir una curva perfecta, insiste Van Dijk.
Uno de los secretos de maquillador que proponen es: «En vez de apretar en un único punto, comienza cerca de la raíz y ve ascendiendo, presionando suavemente a medida que te acercas a la punta. De esta forma, en vez de marcar un solo punto de curvatura, crearás un movimiento más natural«.
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