Redacción. El sacerdote franciscano Leopoldo Serrano sostuvo este miércoles en horas de la mañana una reunión con las autoridades del Instituto Nacional Agrario (INA) e Instituto de la Propiedad (IP), quienes le aseguraron el respaldo para proceder con la reconstrucción de la comunidad La Reina, en Santa Bárbara.
En el encuentro se acordó que ambas instituciones de Estado van a entregar los terrenos con sus respectivos títulos de propiedad a los pobladores de la comunidad afectados desde hace años luego de los embates de Eta e Iota.
Francisco Funes, director del INA, confirmó que esta es la respuesta a la petición del padre Serrano, quien realizó una caminata desde San Pedro Sula hasta Tegucigalpa a fin de solicitarle a la presidenta Xiomara Castro ayuda para las familias daminificadas de la comunidad La Reina.
Entre tanto, el padre manifestó: «La orden es que mañana tiene que hacerse el despeje de la energía, o sea, tiene que haber energía en los cables que están en la colonia y, por ende, en las casas».
Agregó que el 17 de julio es la fecha para que se cumpla la meta, tal como se lo indicó la mandataria hondureña. «Tiene que estar electrificada la colonia San Francisco de Asís», acotó.
Lea además: Padre Serrano logra acuerdos con la presidenta Castro
Agradecimiento
El padre aseguró que avanzan por buen camino y destacó su agradecimiento a los medios de comunicación del país que lo acompañaron al llegar a Casa Presidencial.
También afirmó que los habitantes de la comunidad de La Reina están muy contentos y remarcó que lo recibieron con mucha alegría tras su viaje de regreso desde Tegucigalpa. «Yo no quería fiestas porque iba cansado, pero a mí no me gustan las fiestas», agregó.
Serrano dijo entre líneas que no le «gustan los halagos, porque los halagos tienen que ser para el Todopoderoso (Dios). Es él el que permite. Yo no creía que iba a llegar caminando a Casa Presidencial; yo dije ya no puedo, pero después seguimos y lo logramos».
Por último, el religioso se dirigió a los medios de comunicación, periodistas y comunicadores sociales: «Ustedes son los oídos, la boca y los ojos del pueblo. Si ustedes no hablan, no denuncian, son mudos. Si ustedes no oyen el grito del pueblo son sordos. Ustedes si no miran, no van al lugar, serían ciegos”.