HONDURAS. La reina Letizia de España llegó a territorio hondureño el pasado 14 de diciembre y durante su estadía visitó el Valle de Sula, específicamente la «zona cero», donde dejó plasmado su lado más humano.
Su majestad quiso, personalmente, visitar una de las regiones que sufrieron directamente los azotes con el paso de los fenómenos tropicales Eta e Iota. En tal sentido, fue a un albergue y a una escuela en el municipio de La Lima.
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Desde que bajó de su avión, a la reina se le vio con un toque sencillo, su vestimenta incluía un pantalón beige, una camisa blanca, un chaleco rojo y unas botas.
Acompañada de un fuerte contingente, en primeras instancias, la reina llegó hasta el Centro Básico Oswaldo López Arellano. Ahí, la reina tuvo un encuentro directo con los estudiantes de la institución y pudo observar la afectación de las inundaciones.
La escuela se desarrollará por parte de la Cooperación Española, un proyecto de reconstrucción y transformación educativa.
La reina en albergue de La Lima
Posteriormente, se movilizó hacia el albergue ubicado en el Instituto Patria de La Lima. Allí, pudo comprobar la situación actual de cientos de limeños que perdieron todo a raíz de las inundaciones.
En su recorrido, la reina Letizia conversó con varios damnificados, incluso, se sentó en una de las colchonetas para poder platicar mejor con una madre y su pequeño. Asimismo, en el área recreativa, mientras los niños estaban jugando, se acercó y observó detenidamente la actividad que realizaban.
Y es que, además de sostener conversaciones con diferentes autoridades hondureñas, la reina mostró su compromiso y lado humano con los albergados. “Tenemos miedo al COVID. El problema es que ahora tenemos miedo a otras cosas también. No nos queda nada”, explicó un damnificado a la reina.
Ayuda humanitaria
Es importante recalcar que la reina Letizia de España hizo entrega a las autoridades hondureñas de 120 toneladas de ayuda humanitaria para los afectados por las tormentas tropicales.
En las donaciones se incluyó kits de alimentación para 15 días, kits de higiene personal para 30 días para bebés, mantas, mosquiteros, tiendas de campaña, 24,000 pruebas rápidas para detección de COVID-19, entre otros.
Al cumplir con su agenda, su majestad abandonó el territorio hondureño ayer martes, a eso de las 7:00 de la noche, partiendo desde el aeropuerto Golosón de La Ceiba, nuevamente hacia España.
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