Redacción. El Ejército colombiano informó este domingo que a pesar del éxito de la misión de rescatar a los 4 niños perdidos en la selva, los militares siguen trabajando en el lugar para encontrar al último de los perdidos: el perro rescatista Wilson.
«¡Un comando no abandona a otro comando, ninguno se queda atrás!», es la consigna que las Fuerzas Militares de Colombia lanzaron en sus redes sociales para actualizar el estado de la búsqueda de Wilson.
El pastor belga malinois se perdió mientras colaboraba en la búsqueda de los menores en las profundidades de la selva.
Desorientado
Gustavo Narváez Orozco, coronel del Ejército, informó que el can desapareció el 18 de mayo, tras obedecer la orden de su guía.
«Fue muy extraño porque el perro está entrenado para eso, para meterse en profundidad y volver donde su amo», detalló el coronel.
Sin embargo, volvieron a verlo 2 días después. «El 20 de mayo, nuestro personal observa al perro, el guía se acerca y el canino en una reacción poco normal, emprendió la huida y no lo volvimos a ver», asegura el militar.
La última vez que lo vieron
Según el relato, los elementos de rescate encontraron a Wilson el 6 de junio por última vez y de inmediato notaron que algo no estaba bien.
«Quien lo vio, lo vio un poco flaco. Intentaron acercarse con comida, llamados y una perrita que llevamos de la Defensa Civil». Agregó que «mandaron a la hembra para que buscara juego a Wilson, entretenerlo, acercarnos y ubicarlo. Apenas nos vio, huyó y esa fue la última vez que tuvimos contacto con él», finalizó Narváez.
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Hipótesis
Según el coronel, una de las posibles teorías es que Wilson se pudo haber topado con un animal que le intimidó. «En la selva hay animales como caimanes, jaguares, panteras, anacondas. Cualquiera de estas fieras puede intimidar a nuestro perro, asustarlo y él cambiar su comportamiento», declaró ante los medios.
Por otras parte, Carlos Andrés Villegas, voluntario de Defensa Civil que se adentró en la selva colombiana y que trabajó con Wilson, opina algo diferente.
Villegas asegura que el pastor belga no estaba entrenado para labores de rescate en selva, y estaría acostumbrado a otro tipo de actuaciones. Además, destacó las dificultades del terreno en la búsqueda, pues al parecer, presentaba mal clima y abundante lluvia.
«Los niños hablaron de él»
Astrid Cáceres, directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, centro que actualmente cuida de los menores, relató que Wilson pudo haber estado con los niños en la selva.
«Los niños hablaron del perrito que se les perdió, que no saben dónde quedó y que los acompañó un rato», contó.
A esta pista se suma que los militares aseguran haber «encontrado huellas que serían de los menores y muy cerca también las que podrían ser del perro«.
