REDACCIÓN.- ¿Sabías que las uñas pueden revelar algunas enfermedades, a través de cambios en el color y en la forma? Aunque quizá sean la causa más conocida, los hongos no son los únicos responsables de las alteraciones.
Los dermatólogos de los hospitales Quirónsalud señalan que estas pueden reflejar la presencia de muchas enfermedades, que pueden ser propias de las uñas, de la piel o sistémicas.
Los cambios más habituales en las uñas
Las alteraciones que se suelen presentar con más frecuencia son:
- Cambios de color, por ejemplo, se pueden volver amarillentas, oscuras, blancas y verdes, entre otros.
- Engrosamiento
- Roturas en forma de láminas
- Fisuras
- Agujeros, o pits, en la superficie
- Rugosidad
- Cambios en la forma o en el tamaño
- Alteraciones en el tejido situado alrededor de la uña, como puede ser la uña encarnada y los tumores.
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Existen determinadas alteraciones en las uñas que se asocian a enfermedades ungueales, que afectan solo a las uñas de forma local, pero también pueden ser cutáneas o incluso tratarse de un síntoma de enfermedades sistémicas que se reflejan en el aspecto de las uñas. Te listamos las más habituales de cada tipo.
Trastornos de las uñas
Son enfermedades que solo afectan a las uñas, como, por ejemplo:
- Infecciones, causadas por bacterias, virus y hongos. Con respecto a estos últimos, los especialistas recuerdan la importancia de realizar un examen antes de empezar el tratamiento.
- Lunares, cuya revisión dermatológica es tan importante como cualquier otro lunar debido al riesgo de malignización.
- Hematomas o lesiones traumáticas.
- Tumores, que pueden ser desde verrugas a lesiones malignas.
Enfermedades cutáneas: psoriasis, liquen plano y alopecia
Las uñas pueden reflejar la presencia de ciertos problemas en la piel, como por ejemplo:
- Psoriasis. Puede causar manchas amarillentas en las uñas, que se denominan manchas de aceite, así como el engrosamiento de las mismas o la aparición de agujeros o pits en su superficie.
- Liquen plano. Puede alterar el aspecto de las uñas para que adquieran forma de «V», lo que se denomina pterigium, o también puede destrozarlas manera parcial o total.
- Alopecia areata. Puede afectar a las uñas causando agujeros o pits en la superficie, haciendo que se vuelvan más frágiles, o dibujando hendiduras que se llaman líneas de Beau.
Enfermedades sistémicas más graves
Este tipo de patologías generalmente afectan a todo el cuerpo y algunas de ellas pueden llegar a modificar el aspecto y la forma de las uñas. Entre estas enfermedades sistémicas se encuentran:
- Enfermedades cardiacas o pulmonares. Pueden cambiar la forma de las uñas hasta el punto de que parezcan cucharas o palillos de tambor.
- Ciertas enfermedades renales. Pueden relacionarse con las uñas que tienen una mitad de color blanco y la otra mitad es de color rosa o marrón.
- Enfermedades hepáticas. Pueden provocar cambios en la coloración de las uñas, como las uñas de Terry, cuyo aspecto es blanco con una fina banda de color rosa situada en la punta.
- Determinados cuadros genéticos. En ocasiones originan ciertas alteraciones en las uñas que pueden resultar útiles para los diagnósticos. Ejemplo de ello son los tumores de Köenen en la esclerosis tuberosa.
- Efectos adversos de la medicación. Existen ciertos fármacos que pueden repercutir en las uñas, por ejemplo, la coloración marrón se asocia al tratamiento de Zidovudina.
Por último, los dermatólogos concluyen que la patología ungueal es muy variada, por lo que requiere un adecuado diagnóstico no solo para recibir el tratamiento correspondiente, sino también para confirmar que no se trata de otras enfermedades cutáneas o sistémicas de mayor gravedad.
Fuente: Quirónsalud.
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