TEGUIGALPA, HONDURAS. La producción primaria de alimentos está deprimida, pese a que son el sector de la cadena alimenticia que más trabaja y arriesga, pero que siempre obtiene menos ganancias, es la denuncia que hizo Juan Valladares, vicepresidente del Programa Nacional de Granos Básicos (PROGRANO).
De acuerdo con Valladares, en Honduras la producción agrícola no llega al 50 % por la falta de apoyo del Gobierno Central, a esto se le suma que en Olancho, solo el 5 % de sus tierras están irrigadas.
«Apenas el 5 % de los productores nacionales cuenta con un sistema de irrigación, el otro 95 % tiene sembradío temporal, cuando se tiene invierno exitoso», denunció Valladares.
En ese sentido, el productor aseguró que ya han solicitado ayuda al Gobierno para que se les otorgue préstamos «pero a un plazo y tasa de interés manejable y así poder desarrollar infraestructura de pequeños sistemas de riego en las áreas donde contamos con riego superficial».
Lea también – Gobierno: Productores tendrán créditos a 10 años plazo con Agrocrédito
«Pequeños productores no accederán a financiamientos»
A criterio de Rafael Alegría, dirigente sindical y campesino, la situación actual es realmente grave en cuanto a la producción de alimentos se refiere.
«Todo es absolutamente incierto en cuanto a producción y productividad. Tenemos un déficit de arroz en más del 80 % y nos estamos quedando sin granos básicos», cuestionó el también exdiputado durante una entrevista con Tiempo Digital.
Consultado sobre los mecanismos de financiamiento que recientemente implementó el Gobiern para los productores nacionales, Alegría aseguró que por el hecho de estar en la Central de Riesgo, ningún campesino podría acceder.
«Por ese medio, ningún pequeño o mediano productor y campesino va a quitar un crédito. Primero, tenga la seguridad que la mayoría de pequeños agricultores están en la Central de Riesgo y no va a ser posible que accedan a ese financiamiento; por otro lado, los campesinos no tienen ni para comer, mucho menos para garantías a un crédito», explicó el dirigente.
En ese sentido, sostuvo que, como parte del sector, solicitan que se consolide el Banco Nacional de Desarrollo Agrícola (BANADESA) y se tomen en cuenta otros mecanismos como las cajas rurales y las cooperativas de productores.
No obstante, Alegría cuestionó que «siempre están pensando en BANHPROVI y en estas instituciones creadas por el Partido Nacional».
«Nosotros presentamos desde el 6 de febrero una alternativa viable. Esto, para que se emitiera una ley en el Congreso Nacional, no unos ‘pinches’ PCM que nadie los cumple, ni el Gobierno los ejecuta, porque no tienen capacidad», aseveró.
En consecuencia, Rafael Alegría advirtió que la situación alimentaria seguirá siendo critica en el país y se va a alargar en los siguientes meses, incluso hasta para el próximo año.
Gobierno debe identificar agricultores de mayor nivel tecnológico
Sobre el tema, el ingeniero agrónomo Manuel Iván Fiallos explicó que los agricultores con mayor nivel tecnológico, es decir, sistema de riego presurizado, deberían ser un bastión importante para el Gobierno, porque en este momento, solo ellos pueden garantizar seguridad alimentaria
Lo anterior, debido a que poseen un buen nivel tecnológico, tienen un sistema de riego que pueden aprovechar al máximo, lo que les permite sembrar hasta en verano.
«El Gobierno debe identificar que agricultores pueden sembrar inmediatamente ahorita son aquellos que tienen sistemas de riego», enfatizó Fiallos.
Problema de la seguridad alimentaria
El exdiputado denunció que el Gobierno emitió un decreto ejecutivo donde les ordenó a las tres grandes procesadoras de semillas que le vendieran sus producciones. Por lo que los productores no pueden comprarla para sus plantaciones.
Asimismo indicó que esa producción de semillas que compró el Gobierno, la ocupa para hacer bonos tecnológicos. «Donde al productor le dan 25 libras de semilla y un saco de urea para que los productores lo siembren en tierras marginales».
En consecuencia, «el agricultor lo que va hacer es esperar el invierno pero este no viene todavía, entonces allí es el problema de la seguridad alimentaria», explicó Fiallos.
De igual forma señaló que el Gobierno le entrega dichos bonos a los alcaldes o se los dan a los diputados para que estos hagan política entregando los bonos tecnológicos en sus respectivos departamentos.
Acto seguido, «el alcalde se lo entrega a su correligionario pero no sabe qué tan bien o qué tan mal ande sembrando el productor. Es tan extremo este tema que ya en el hospital de Marcala, La Paz, por ejemplo, han llegado al hospital hermanitos intoxicados porque la mamá que le dieron bono tecnológico pero que no tiene como sembrar vendió el fertilizante y los frijoles los lavó y ella creyendo que están bien lavados los coció para alimentar a su familia y llegó con los niños envenenados al hospital», contextualizó.
Por lo anterior, puntualizó que para crear seguridad alimentaria en este momento es con aquel que tiene buen nivel tecnológico y que pueda sembrarse eso con un compromiso.
Agrocrédito 8.7
En cuanto al mecanismo de crédito que creó el Gobierno al cual denominan Agrocrédito 8.7, Fiallos objetó que es un modelo que «le da risa a los bancos».
«Viene el presidente y dice: miren ya tenemos el Agrocredito 8.7, eso quiere decir que el agricultor va a pagar 8.7 de interés de un préstamo que puede ser de hasta diez millones de lempiras. El gobierno va responder con el 70 % pero con los llamados bonos de confianza, que son una reserva de dinero que tiene el Gobierno con la que le responde al productor en el 70 % de su crédito».
«Si el productor sacó 100 mil lempiras, el Gobierno le responde en garantía por 70 mil lempiras. Entonces usted solo tiene que poner una garantía de 30 mil lempiras para responder por el crédito. Eso funciona así, el banco le manda hacer un evalúo y si su propiedad vale un millón de lempiras el banco no le presta un millón, sino que le presta 500 mil y de esos 500 mil, el Gobierno va a responder en garantía hasta el 70 % y productor hasta el 30 % pero con una salvedad y es que usted no esté en la Central de Riesgo, ¿y ahorita que agricultor no está en la Central de Riesgo?», cuestionó el experto.
Decreto de excepcionalidad
Sobre ello, Fiallos recomendo que se debería emitir un decreto de excepcionalidad por razón de la emergencia del COVID-19.
Lo antes expuesto significa que «para poder acceder al Agrocrédito 8.7 se hace una excepción de la gente que está en la Central de Riesgo para que se les pueda prestar este año para que reactiven las unidades de producción porque estas están reventadas, porque no tienen dinero, no tienen cómo producir», explicó Fiallos.
Sumado a ello, el exdiputado subrayó que «el problema del crédito no es interés, porque al productor le pueden dar un crédito al 10, 12 o 14 %, con tal de que tenga acceso a ese crédito porque la Central de Riesgo no lo tenga gravado. El tema es que si no aflojamos la Central de Riesgo y no hay una ley donde se haga una excepcionalidad y se permite que por esta pandemia los productores puedan acceder al Agrocrédito 8.7 sin importar su estatus en la Central de Riesgo, entonces esos fondos se van a dinamizar de la manera más rápida posible».
Habrá más apoyo a los productores, dice diputado Segura
Sobre las constantes denuncias que hacen los productores nacionales, Tiempo Digital buscó la reacción del diputado Mario Segura, quien reconoció la situación precaria por la que atraviesan los representantes de ese sector alimentario.
Asimismo enfatizó que los problemas en el sector agrícola vienen de años anteriores y estos se han acentuado más con el tema del COVID-19.
«La cuarentena también ha obligado a parar las exportaciones de frutas, verduras y granos básicos y otros productos de consumo interno», afirmó Segura.
Sobre lo expuesto por Juan Valladres de PROGRANO y Rafael Alegría de Villa Campesina, el diputado dijo que «ellos tienen toda la razón. El productor de granos básicos es el que recibe todos los impactos; ya sea por el mal tiempo, cuando se pierden los cultivos, las plagas. Además, cuando lo saca al mercado, los acaparadores se quedan con la mayor ganancia».
Sin embargo, confirmó que habrá más apoyo para tan vulnerable sector. «Yo creo que esta temporada habrá un poco más de apoyo, hemos reiterado en el Congreso que el país tienen que empezar a cultivar sus granos básicos».
Lo anterior, «puesto que todos los países de Centroamérica, en estos momentos no exportarán granos básicos a Honduras. En el caso del frijol, gran parte lo adquiríamos en Nicaragua», explicó el parlamentario.
Línea de crédito
El entendido en el tema, recordó que desde el Congreso Nacional se aprobó una línea de crédito a través de BANHPROVI. Esta contaba con más de 5 mil 500 millones de lempiras.
Dichos fondos se prestarán al 8.75 %, y de igual manera, se tiene una línea especial de garantías por mil millones de lempiras. Sumado a ello, hay 250 millones en el Banco Central de Honduras (BCH) que vienen a potenciar y ayudar al sector agrícola, detalló Mario Segura.
Le puede interesar: ¿Cómo funcionan los préstamos para mipymes que aprobó el Gobierno?
«Ojalá que esos fondos que tiene BANHPROVI se puedan colocar y que la banca privada también esté dispuesta, porque son fondos de redescuento. BANHPROVI tiene un banco de primer piso, pero quizá no podrá atenderá la mayoría, por eso se hará uso de la banca privada», externó.
Finalmente, el diputado Segura, propuso que las autoridades deben ir al campo e identificar las necesidades que tienen el agricultor, tal y como se hacía en el pasado.
? Suscríbete gratis a más información sobre el #COVID-19 en nuestro WhatsApp haciendo clic en el enlace: bit.ly/whatsapptiempo
