Redacción. El subcomisario de la Policía Nacional, Edgardo Barahona, informó a la ciudadanía que todo aquel que haga disparos al aire en la celebración de Año Nuevo y que provoque la lesión o muerte de una persona, podría enfrentar una sentencia de hasta 10 años de prisión.
Barahona manifestó que disparar armas de fuego apuntando al cielo representa una amenaza para la población, ya que toda bala que asciende o desciende a mayor velocidad puede provocar la muerte de personas inocentes.
Por lo tanto, exhortó a la población que posee armas de fuego a reflexionar sobre las consecuencias de sus acciones. Además, pidió evitar percutir estos artefactos para celebrar la llegada del año 2024.
El miembro de la Policía recordó que el Código Penal de Honduras estipula penas para los que disparan al aire y causan daños.
Sin embargo, explicó que para quienes realicen disparos al aire sin causar incidentes y sea debidamente denunciado podría enfrentar una condena de seis meses y un año de prisión. Asimismo, la confiscación de su arma de fuego por seis años.
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Cero reportes
Por otra parte, Barahona informó que durante las celebraciones de Navidad no se recibieron reportes de disparos al aire. Por lo tanto, espera los mismos resultados para los festejos de Año Nuevo.
«Esperaríamos que lo ocurrido en la víspera de Navidad se repita en el Fin de Año. Además, que la población hondureña que posee un arma de fuego ya haya desarrollado una conciencia de la responsabilidad que conlleva el permiso otorgado», manifestó.
Finalmente, recordó que una de las restricciones para quienes tienen el permiso de portaciones de armas, es precisamente, efectuar disparos al aire.
