INTIBUCÁ, HONDURAS. ¿Dónde está el agente de la Policía que trasladó el cuerpo de Keyla Martínez desde la Unidad Departamental No. 10 hasta el hospital de La Esperanza? El reporte médico lo revela, y podría ser clave para esclarecer el caso.
Se trata de Yorman Anael Ventura, con el número de identidad 0309-1995-00024, así lo revelaron los mismos médicos que, cuando llevaron a Keyla al centro asistencial, confirmaron que ya estaba muerta.
Según dio a conocer la Policía Nacional, él se encuentra en la unidad de El Ocotal, Francisco Morazán, que es sede de la Secretaría de Seguridad, junto a 11 uniformados más, bajo resguardo policial, resguardado por otros agentes.
Aún ninguno declara
El Ministerio Público (MP) continúa indagando en la misteriosa muerte y de momento se desconoce quiénes son los sospechosos de asfixiar a Keyla, de modo que, a pesar de que él fue quien la llevó hacia un hospital, no se puede decir que él participó en el hecho.
Lo único que sí es seguro, es que, el agente Ventura, originario de Lejemaní, Comayagua, sí podrá ser un testigo clave para las autoridades y deberá declarar ante el MP y la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC).
Sin embargo, ni él ni sus compañeros han comparecido ante las entidades de investigación. “Se sigue trabajando, pero aún no se ha tomado declaración de los policías. No hay un día específico para que lo hagan. Las investigaciones continúan para tener más elementos. Con base a eso se tendrá un mejor soporte para el interrogatorio”, dio a conocer el portavoz del MP, Yuri Mora.
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Policía y su versión de «suicidio»
«Cuando se encontraba en la celda, todavía tenía signos vitales. Posteriormente ella falleció en el hospital de Intibucá”, mencionó el subcomisionado Alvarenga a medios televisivos el día domingo 7 de febrero.
Sin embargo, médicos que recibieron a la muchacha en el hospital desmintieron a la Policía, pues según su reporte de turno, Keyla Martínez «ingresó fallecida», información que les fue dada a los agentes que la habían llevado.
Policías sospechosos
Luego de que el Ministerio Público (MP) confirmara que la muerte de la enfermera Keyla Martínez no fue un suicidio, sino un homicidio, las autoridades de la Secretaría de Seguridad procedieron a relevar al personal policial que estaba asignado a La Esperanza, Intibucá, y trasladarlo a Tegucigalpa.
A través de un comunicado, esa institución también informó que los uniformados, los concentraron en la sede de la Dirección General de la Policía Nacional. Ahí permanecen 12 agentes y siete son verdaderamente sospechosos.
En su documento, la Secretaría de Seguridad indicó que se procedió a la inmediata remisión de los funcionarios policiales para los fines o acciones que el ente fiscal estime pertinentes.
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