RÍO ABAJO, HONDURAS. Una semana de sacrificio por el toque de queda fue suficiente para los habitantes de la aldea Río Abajo, a unos 12 kilómetros de la capital.
Decenas de personas se apostaron en la calle principal para protestar y describir las carencias que tienen. La acción se realizó de manera pacífica en el tramo carretero con el objetivo de exigir al Gobierno que les envíe agua y alimentos.
Aquejan que la ayuda prometida para aliviar la problemática de COVID-19, que se promociona a través de cadenas nacionales, aún no llega a este sector.
Incluso, se mencionó que ciertos lugareños presentes votaron por el actual mandatario, Juan Orlando Hernández, entonces le piden que se acuerde de quienes lo apoyaron.
La Policía Nacional se personó al lugar para dialogar con los manifestantes y procurar que no se interrumpiera el tránsito vehicular.
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Por los niños
En primera instancia, una dama, de manera anónima planteó que quienes más sufren son los más pequeños. «Pedimos una ayuda. ¡Estamos con necesidad y llorando de hambre por los niños! También por los transportistas», clamó.
Seguido, tuvo palabras para el gobernante de la nación.
«Le pedimos al presidente Juan Orlando Hernández que se toque la conciencia y nos mande agua y comida. Aquí hay hombres que no tienen trabajo y hasta niños discapacitados», enfatizó.
«Le pedimos que, así como le dimos el voto, que se acuerde de la población de Río Abajo», subrayó. Antes de cerrar su participación afirmó que ella es una vendedora en el mercado; quiso explicar que en el pueblo no son haraganes, pero salen porque ya no «aguantan el hambre».
¿Y lo que se dice en las cadenas?
Asimismo, el transportista César Lagos también tuvo palabras para sumar a la petición de productos de primera necesidad. ¿Quiénes de ese rubro se sumaron a la manifestación?
«Nosotros los motoristas cubrimos tres rutas del transporte interurbano. Además están los cobradores, los taxistas y los carwasheros. Hemos tomado la decisión de salir pacíficamente a la carretera y solicitarle al Gobierno», detalló.
«Así como hacen cadenas por los medios donde dicen que hacen repartición de comida, que nos ayuden a nosotros», pidió.
De igual manera, especificó algunos productos que están ausentes en sus hogares. «No tenemos jabón para lavar ropa o trastes. Tampoco para bañarnos, ni agua. Aquí vamos a estar hasta que nos atiendan», sentenció.
Por último fue enfático en que ellos viven del día a día y, lo poco que tenían ahorrado, se terminó en la semana anterior que cubrió el toque de queda.
