INGLATERRA. Una estudiante de piloto de 21 años, originaria de Inglaterra, murió después de ser picada en la frente por un mosquito, lo que le produjo una infección que se extendió hasta su cerebro.
Oriana Pepper estaba por convertirse en una piloto de una aerolínea comercial y había aprobado sus exámenes teóricos en el programa EasyJet en Oxford. La joven viajó a Bélgica para sus calificaciones de instrumentos.
Infección severa en el cerebro
La joven, de solo 21 años, falleció cinco días después del incidente tras sufrir una infección severa. El hecho ocurrió hace un año, pero hasta hace poco se revelaron los resultados de la autopsia.
Según la investigación, esta picadura resultó ser la que acabó con su vida en cinco días. Pepper fue picada por un mosquito en la frente en la ciudad de Amberes. Fue hospitalizada el 7 de julio del año pasado cuando se propagó la infección.
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La aspirante a piloto fue dos veces al hospital ante la evolución de la infección. Pepper empezó a notar un fuerte dolor en la picadura que le había causado un insecto en la frente, justo encima de la ceja. Cuando acudió al hospital, le recetaron varios antibióticos y decidieron mandarla a casa. Sin embargo, la joven no notó mejoría y comenzó a sentirse peor.
Oriana Pepper comenzó a padecer un fuerte dolor de cabeza que posteriormente se trasladó a la espalda. Poco después, la joven comenzó a tener, incluso, problemas para poder comunicarse.
Una vez ingresada, Pepper nunca salió del hospital, ella falleció tres días después rodeada de sus padres, de su hermano y su novio.
Resultados de la autopsia
El forense principal de Suffolk, Inglaterra, Nigel Parsley, reveló que la piloto murió “como resultado de una infección grave causada por la picadura de un insecto en la frente”.
“Una infección entró en la piel de Oriana luego de la picadura de un insecto. Luego ingresó en la arteria carótida del cuello y provocó embolias sépticas en su cerebro. Nunca antes había visto un caso como este”. explicó el forense.
El padre de la joven dijo que «a su hija nada le gustaba más que volar con su padre y con su hermano Oliver», añadió que «Oriana estaba entrenando para ser piloto comercial y estaba cumpliendo sus sueños».
Además, la madre confirmó que «se había establecido una pequeña beca para alentar a las mujeres a ser piloto», en colaboración con la Asociación Británica de Mujeres Pilotas, en memoria de la joven Oriana Pepper tras un año de su muerte.
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