TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El comunicador Brayan Hernández habló con lujo de detalle todo lo concerniente a su detención que ocurrió ayer, jueves, en el centro de la capital.
Hernández dijo a Hoy Mismo que andaba cumpliendo con sus labores periodísticas, cubriendo una denuncia ciudadana cuando se suscitó el incidente con las autoridades de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT).
«Un vehículo se pasó por el carril contrario rebasándome y yo le hice el reclamo a un agente de la DNVT consultándole por qué no lo detenía porque casi me golpea el retrovisor», expresó.
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Detonante del problema
El comunicador detalló que cuando hizo el reclamo, la autoridad le pidió que se orillara y se pegó al vidrio de su automóvil pidiendo la licencia y revisión.
«Me dijo que me iba a hacer una esquela y yo le consulté: ¿Cuál es la infracción?, se sentía confiado porque otro agente me estaba grabando», especificó.
Además, mencionó que él también sacó su teléfono para empezar a grabar en audio y vídeo.
«El agente me preguntó que por qué lo estaba grabando y yo le dije, porque usted lo está haciendo y quiero que queden pruebas de todo», resaltó.
En ese sentido, aseveró que la autoridad quiso arrebatarle el teléfono, pero no pudo.
«Quiero que venga una autoridad suya y me expliquen por qué y bajo qué artículo ustedes están queriendo aplicar la infracción», contó.
«Me ofendieron»
Por otro lado, el periodista hondureño enfatizó en que tiene pruebas, donde se muestra que le entregó la licencia.
«Cuando se la di, llegó otro compañero y dijo: Ponele la esquela a este periodista prepotente que se creen lo máximo», relató.
Asimismo, informó que lo ofendieron cuando él les dio la licencia y estaban burlándose preguntando: «¿Qué infracción le pongo?» y le contestó: «Ponele la peor».
«Hasta el día de hoy, no tengo mi licencia, ni la esquela y los mismos policías me botaron mi equipo de trabajo», lamentó.
Del mismo modo, Hernández manifestó que a todo momento, estuvo grabando y ellos estaban incómodos por eso.
«Me pidieron que dejara de grabar y por eso se dio el forcejeo, me empezaron a grabar, luego tiraron a la paila de la patrulla y en el trayecto me pegaron patadas, jalaron del pelo y me dieron golpes», declaró.
Por último, concluyó mencionando que andaba con politraumatismo por los golpes que le propiciaron en su cuerpo.
«Yo no digo esto porque me quiero hacer la víctima. Estoy molesto porque un miembro de la Policía Nacional se estaba burlando de mí, así que hago un llamado a las autoridades para que separen a esa gente poco profesional», finalizó.
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