Si has decidido adentrarte en una nueva etapa en tu vida involucrando el ejercicio, especialmente, ir a correr de vez en cuando, es necesario que conozcas como principiante la periostitis tibial.
¿Un dolor en la pierna? Es probable que cualquiera lo llame así, pero realmente es más que una simple molestia. Por tal, si tú inicias en el mundo del running o si llevas tiempo pero no habías escuchado de esta lesión, la información te servirá de mucho.
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La periostitis tibial es reconocida como «dolor en las espinillas»; si te preguntas la razón es porque el término «espinilla» es para referirse a la tibia, el hueso grande que se encuentra en la parte delantera de la parte inferior de la pierna.
Los dolores en las espinillas son frecuentes en los corredores, los bailarines y los reclutas militares.
Conocido en términos médicos como síndrome por sobrecarga de la parte media de la tibia, el dolor en las espinillas suele ocurrir en atletas que recientemente han intensificado o cambiado sus rutinas de entrenamiento. El incremento de la actividad sobrecarga los músculos, los tendones y el tejido óseo.
El dolor suele aparecer durante la actividad o justo después de realizarLA.
Entre las causas que lo provocan no solo es correr y ya. El dolor de la periostitis tibial es causado por la irritación e inflamación de los músculos, los tendones y los huesos de la parte inferior de la pierna.
La molestia claramente aparece en personas que realizan actividades de alto impacto o con detenciones y arranques frecuentes, como correr, saltar, bailar, o practicar baloncesto.
También, es muy probable que una persona sufra de periostitis si:
- Tiene pie plano
- Hace ejercicio físico con calzado deportivo desgastado
- Es una persona con sobrepeso
- Tiene poca flexibilidad en la cadera y los tobillos
¿Si tienes periostitis tibial puedes practicar deportes?
Una persona con esta lesión:
- Puede practicar cualquier deporte que no le cause dolor.
- Debe dejar cualquier actividad que le provoque dolor.
- Puede retomar los deportes lentamente después de haber estado dos semanas sin dolor.
La periostitis tibial suele mejorar por completo con reposo.
Para ayudar a prevenir la reaparición de la periostitis tibial, haz lo siguiente:
- Usa calzado deportivo que absorba los impactos y tenga soporte para el arco.
- Cambia el calzado deportivo que no te quede bien o esté desgastado.
- Aumenta lentamente la rutina de ejercicio físico.
- Trabaja con un entrenador para asegurarte de entrenar de manera segura.
- Haz un entrenamiento variado con distintos tipos de ejercicios en diferentes días.
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