Cortés, Honduras. Ayer, dos miembros de la Pandilla 18 recibieron la condena de 11 años y tres meses de prisión en los Juzgados de San Pedro Sula.
Según el comunicado, los cudadanos fueron culpados por el delito de extorsión en contra de un testigo protegido. Según las pruebas presentadas, ellos operaban en la colonia 15 de Septiembre, de Chamelecón.
Cabe mencionar, que a los imputados también fueron obligados a pagar una multa de 37.5 salarios mínimos por ese ilícito.
Las autoridades declararon que los jóvenes, Reinery Alexander Sánchez García y Fabiola Monserrath Henríquez Rodríguez, «aceptaron su culpabilidad».
En el comunicado de los Juzgados, detallan que Reinery purgará una pena de seis años de cárcel por el delito de portación ilegal de arma de fuego de uso prohibido. Por lo mismo, pagará reclusión más una multa de 3,750 lempiras.
Antecedente de captura
Hay que recordar, que la Fuerza Nacional Anti Maras y Pandillas (FNAMP) arrestó en mayo de 2019 a cuatro supuestos integrantes, en auqel momento, de la Pandilla 18. Entre ellos estaban los condenados y un menor de edad.
De tal forma, que en ese momento les decomisaron dos armas de fuego y dinero en efectivo, que los agentes adjudicaron al cobro de extorsión.
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Es importante decir, que el proceso de aprehensiones y el juicio se ejecutó después de que una persona llegó -el 30 de abril del 2019- a la FNAMP y denunció que el 28 de abril (mismo año) «varios individuos llegaron a su negocio» y dijeron que eran de la 18. Ellos le pidieron 500 lempiras semanales, y sí no lo hacía «atentarían contra su familia».
Tercer imputado
El tercer integrante del grupo de los arrestados en esa fecha es Hugo Patricio Chávez Silva, quien «no aceptó la vía del procesos abreviado», dijo el Poder Judicial.
Por lo tanto, en la audiencia preliminar se formalizó el juicio en su contra por extorsión y uso de nombre supuesto. Esto, porque al momento de su detención se identificó con el nombre de Jared Isaí Chávez Paz.
Tendrá juicio oral y público en su contra, auqnue no determinaron la fecha y su expediente se trasladó al Tribunal de Sentencia con Competencia Nacional en Materia de Extorsión a Tegucigalpa.
Sobre el menor de edad, el proceso legal es diferente, ya que es tomado como un infractor, y corresponde a la Fiscalía de la Niñez hacer la investigación.
