REDACCIÓN. ¿Quién no tiene un destino ideal en sus planes de viaje? Los sitios vacacionales se escogen analizando el clima, las atracciones turísticas y las actividades que allí se pueden realizar.
Para estas vacaciones de Semana Santa, por ejemplo, los lugares más visitados en Honduras son las playas o balnearios debido a la temporada veraniega.
Sin embargo, antes de emprender el viaje es necesario tomar en cuenta ciertas medidas con responsabilidad para que las vacaciones tengan un impacto positivo.
A continuación, enseñamos los pasos a seguir que te convertirán en buen turista responsable en tus viajes.
Escoge bien el destino
Si por ejemplo en verano escoges destinos que en esa época están masificados, contribuirás al sobreturismo, dificultando la sostenibilidad de los recursos y del destino.
Recuerda qué ocurre cuando se da ese fenómeno: degradación ambiental, aumento de los costes de vida y empobrecimiento cultural.
Sé respetuoso
El sobreturismo no sólo consiste en inundar un lugar con más personas de las que puede albergar: también es abarrotar el sitio con personas que no conocen los entresijos de la cultura local.
La gente realmente quiere hacer lo correcto, pero primero tiene que saber qué es lo correcto. Los viajeros deben tener en cuenta que sólo están tomando prestados los lugares de los residentes locales.
Acata las medidas de bioseguridad
En Honduras ya se legalizó el uso voluntario de la mascarilla, pero eso no significa que hay que bajar la guardia en cuanto al contagio de COVID-19. En muchos sitios todavía se conservan las medidas de seguridad que debes respetar.
Y, aunque no en todos los lados se mantengan las medidas, es importante que siempre estés consciente de los contagios virales. Lleva contigo mascarilla, gel y siempre lava tus manos.
Investiga dónde te alojas
Elige un alojamiento responsable: a pesar de los anuncios que prometen que «vivirás como un local», en muchas ocasiones lo que en realidad sucede es que recoges una llave y nunca llegas a conocer a quien te alquila el apartamento.
Los turistas deben verificar si el alojamiento que usan es legal, porque a veces no lo es.
Deja la naturaleza como está
Si entre tus planes está visitar la naturaleza, ten en cuenta que serás tú quien esté en casa de multitud de fauna y flora. No muevas piedras de un lado a otro, no te lleves elementos como conchas, piedras y plantas.
Cuando te encuentres realizando una ruta o una excursión no grites ni alces la voz. Tampoco te salgas del sendero habilitado y si piensas parar a descansar y comer algo, al irte no dejes rastro en la naturaleza.
Consume productos locales
En todas las ciudades existen cadenas de restaurantes, tiendas de souvenirs con recuerdos que no son originales del destino. Adéntrate del todo en la cultura local y consume en pequeños comercios para que tu impacto turístico sea positivo. Por supuesto, apoya la artesanía local y llévate a casa un recuerdo auténtico.
No tires basura
Si has generado residuos durante el día y no has encontrado una papelera, guárdate la basura hasta que encuentres una. Si en ese destino hacen hincapié en el reciclaje, aporta tu granito de arena y desecha correctamente tus residuos.
Hacer la maleta perfecta
En ocasiones hacer la maleta y sobre todo cerrarla, se convierte en un auténtico quebradero de cabeza.
Para evitar más de un sobresalto, es recomendable tener en cuenta algunos trucos que son muy útiles
- Elaborar una lista con lo necesario y desestimar lo innecesario
- Elegir la ropa y los complementos más adecuados
- Colocar sobre la cama todo lo que piensas llevarte
- Poner correctamente las cosas en el interior de la maleta (existen numerosos tutoriales)
- En otras palabras, comprueba que el peso no supera el máximo permitido o que no incluyes documentación importante.
Qué puedo y no debo hacer en una habitación de hotel
Una de las máximas de cualquier hotel es que el huésped se sienta como en casa, pero esto no significa que podamos hacer lo que nos plazca.
Existen una serie de normas que todo cliente debe respetar. Así que toma nota de lo que no se debe hacer nunca en una habitación de hotel
- Ruido
- Bajar la guardia en higiene
- Echar mano del minibar (los productos hay que pagarlos)
- Relajarse en cuestiones de seguridad (es importante cerrar la ventana, utilizar la caja de seguridad o dejar en custodia los objetos de valor)
- Saltarse a la ligera las condiciones de reserva
- Ser maleducado y perder el decoro
- Llevarse lo que a uno le apetezca