San Pedro Sula, Honduras. El abandono de pacientes en los hospitales públicos es una realidad que a diario se vive en Honduras, y de la que muy pocos hablan. Son muchas las personas que, sin importar su edad, ingresan a estos centros que se convierten en su refugio, su techo y su único sustento, ya que no cuentan con familiares que se hagan cargo de ellos.
Comúnmente, quienes más sufren abandono en hospitales son los adultos mayores; sin embargo, también hay casos de jóvenes, por los que nunca nadie regresa a preguntar.
Específicamente, en el Hospital Mario Catarino Rivas, en San Pedro Sula, hay más de 17 pacientes en abandono social y las autoridades del centro hospitalario han tratado de localizar a sus familiares, pero no han obtenido respuesta.
Héctor Palacios, trabajador social del Catarino, indicó a Diario TIEMPO que los pacientes abandonados están distribuidos en las diferentes salas del Hospital.
«De estos 17 pacientes que tenemos, tres o cuatro son adultos mayores, con estos pacientes no tenemos problema porque los reportamos a la Fiscalía y ellos hacen las gestiones para ubicarlos en los hogares», comentó.
Sin embargo, Palacios indicó que la otra parte de los pacientes son menores de 60 años y están en el Hospital como desconocidos.
«Vinieron por atropellamiento, accidentes en calle y los familiares de repente hasta ahora no saben que ellos están aquí, entonces por esa razón, unos los tenemos como desconocidos porque están inconscientes y no dan información y los que están un poco más consiente tratamos de localizar a los familiares, pero hasta ahora no hay respuesta», señaló.
Palacios indicó que el Hospital cubre los gastos de estos pacientes, pero cuando necesitan de estudios o exámenes que ellos no pueden ofrecer, piden colaboración de otros hospitales privados.
Nombres de algunos de los pacientes identificados:
- Jorge Alberto Mejía Girón
- Nelson Calix
- Jorge Alberto Tomé
- Eduardo Santos Munguía
- Mario René Velásquez
- Santos Pineda
- Ismael Aguilar
- Marlon Rivera Argueta
- María Leonor García
- Alejandrina Rodríguez
- Víctor Sánchez
- María Elena Reyes
- Guillermo Chávez
- Wilfredo Nolasco
- Santos Cuello
Vea el vídeo:
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La historia de Jorge Alberto Mejía Girón
Uno de los pacientes en estado de abandono es Jorge Alberto Mejía, de 40 años de edad, quien ingresó al Hospital desde el 2019.
Jorge padece retrasos piscomotores y solamente vivía con su padre en el barrio Medina de San Pedro Sula.
No obstante, el padre de Jorge tomó la decisión de quitarse la vida, dejándolo solo y sin poder sustentarse.
Sus vecinos en ocasiones le regalaban comida y le ayudaban en ciertas necesidades, pero no podían hacerse cargo de él. Jorge se agravó y tuvo que ser llevado al Catarino Rivas. Él entró con un síndrome agudo gastroentérico, desnutrición y deshidratación.
Este hondureño no tenía ningún pariente que se hiciera cargo de él, y sus vecinos, por la situación económica, no se podían comprometer a cuidarlo.
En el 2020, una prima de Jorge llegó al Hospital y durante un tiempo lo visitaba, le compraba lo que necesitaba; no obstante, desapareció de un día para otro. Las autoridades trataron de localizarla pero el número que había brindado ya no estaba habilitado.
Así como la historia de Jorge, los demás pacientes también han tenido que padecer muchos sufrimientos a causa de no tener un pariente o un conocido que les brinde ayuda.
Estos hondureños viven en el Catarino Rivas y solo mantienen la esperanza de que una cara conocida los salve y les ayude a tener una vida digna.
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