Un grupo de científicos brasileños analizó el caso de un paciente que dio positivo a coronavirus en PCR durante 218 días. Durante ese tiempo, el virus se replicó y hasta mutó, informaron este miércoles fuentes académicas.
El hombre de 40 años, antes de padecer la COVID-19, había pasado por un tratamiento agresivo contra el cáncer, lo que había dejado su sistema inmunológico bastante debilitado.
El paciente dio positivo para la enfermedad desde septiembre de 2020 hasta abril de este año.
La investigación, se publicó en la plataforma medRxiv, aunque debe ser revisada por otros expertos. Fue conducida por científicos de la Universidad de Sao Paulo (USP) que descubrieron que el virus no sólo estuvo presente en el organismo del hombre, sino que también se replicó en buena parte de ese tiempo.
«Durante todo ese periodo hubo riesgo de transmisión para otras personas», explicó María Mendes-Correa, profesora de la Facultad de Medicina de la USP y primera autora de la investigación.
El estado del ciudadano se comprobó por medio de exámenes in vitro a partir de muestras nasofaríngeas y de saliva extraídas semanalmente. Luego de unas horas, fue posible apreciar un aumento de la carga viral.
«Esa capacidad replicante del virus fue observada de forma continua y persistente durante un periodo de 196 días consecutivos«, indicó Mendes-Correa.
Entre enero y abril de este año también recolectaron muestras de sangre, orina y de la región anal. Estas pruebas indicaron la persistencia del SARS-CoV-2 a lo largo de buena parte del periodo estudiado.
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NO TUVO DEFENSAS
Por otra parte, exámenes serológicos mostraron que en ningún momento el afectado desarrolló anticuerpos.
Tras el inicio de los primeros síntomas, los científicos detectaron mutaciones del patógeno a lo largo del proceso de infección, a partir de la secuenciación genética de muestras nasofaríngeas recogidas los días 77, 134, 169 y 196
Algunas de esas mutaciones ocurrieron en la proteína ‘spike’ (espiga), de la que se vale el virus para penetrar en las células humanos.
Los datos sugieren que ese proceso evolutivo del virus ocurrió dentro de un mismo huésped, cuando normalmente esos cambios «se observan en comunidad», puntualizó Mendes-Correa.
«Ese es un fenómeno preocupante, pues favorece el surgimiento de variantes virales mejor adaptadas al organismo humano», añadió.
El enfermo estuvo buena parte del tiempo ingresado en el hospital y en los cortos periodos de tiempo en los que estuvo en casa, también permaneció aislado.
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