REDACCIÓN. El departamento de Salud de Nueva York advierte que se están acabando los hisopos para las pruebas de detección del coronavirus.
Es preciso explicar, que están acabando los hisopos para las pruebas de detección del coronavirus en la ciudad de New York y por lo tanto los médicos allí deben aplicar las pruebas solamente a los que ya están hospitalizados, anunció el departamento municipal de salud.
Cabe mencionar, que en un memo a los médicos de la ciudad emitido el fin de semana, los expertos anunciaron:
“Debido a la escasez de los hisopos, existe la real posibilidad de que las existencias en los hospitales se agoten completamente”.
“En estos momentos, se le pide a los médicos aplicar pruebas sólo a los pacientes hospitalizados. A fin de preservar recursos necesarios para diagnosticar a los pacientes y atender eficazmente a los que están gravemente enfermos”.
Como resultado, la advertencia surge en momentos en que los gobiernos tanto del estado como de la ciudad de Nueva York. Le están pidiendo al gobierno federal entregar más pruebas del coronavirus.
“No podremos regresar a la normalidad sin poder aplicar pruebas de diagnóstico a una escala mucho mayor”. Indicó el lunes el alcalde Bill de Blasio al canal MSNBC.
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Estado de New York se ha sometido a pruebas de diagnósticos
Cabe mencionar, que hasta ahora 462,000 personas en el estado de Nueva York han sido sometidos a la prueba de diagnóstico y casi 189,000 han dado positivo.
Es preciso explicar, que debido al racionamiento apenas un 44% de las pruebas aplicadas en el estado han sido en la ciudad de Nueva York, a pesar de que la ciudad representa el 74% de las fatalidades a causa de la enfermedad en el estado.
Por tanto, la falta de equipos, en parte debido al racionamiento de trajes protectores para el personal encargado de administrar las pruebas, ha impedido a las autoridades aplicar pruebas al personal de hospitales y asilos de ancianos, que podrían estar pasándose las infecciones entre sí y a los pacientes.
Como resultado, en todo el mundo, el número de casos confirmados para el lunes era de más de 1,8 millones y unos 115,000 muertos, según el conteo de la Universidad Johns Hopkins.
Por consiguiente, en la mayoría de los pacientes, el coronavirus causa síntomas leves. Pero en otros, especialmente ancianos y personas con problemas médicos previo, pueden sufrir complicaciones graves como neumonía o incluso la muerte.
