TEGUCIGALPA, HONDURAS. Honduras sigue siendo uno de los países más pobres y desiguales del hemisferio occidental donde el 73 % de los hondureños vive en situación de pobreza mientras el 53 % vive en situación de pobreza extrema, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Algunos expertos culpan al sistema neoliberal que manejó durante años el pasado gobierno.
Hasta junio de 2022, el INE informó que seis millones de la población de Honduras se encuentran en pobreza. De estos, cinco millones están en pobreza extrema.
Esa perspectiva, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), podría empeorar para final de año. Estiman que el índice de pobreza podría subir en un 1.1 % debido a la guerra entre Rusia y Ucrania.
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De acuerdo con expertos, Honduras posee múltiples fortalezas y el potencial para un crecimiento más rápido y una mayor prosperidad compartida. Ellos afirman que el país cinco estrellas tiene una buena ubicación estratégica, una base industrial en crecimiento, esfuerzos continuos para diversificar sus exportaciones y una población joven y en crecimiento.
Sin embargo, el país ha recibido duros golpes, sobre todo en 2020 cuando la pandemia del COVID-19 ingresó en marzo amenazando no solo la salud de los hondureños sino que también la economía. Sumado a eso, en noviembre del mismo año las tormentas Eta e Iota provocaron que el Producto Interno Bruto (PIB) se debilitara aún más y comenzara a aumentar la pobreza.
Según el Banco Mundial de Honduras (BCH), esos dos problemas llevaron a que el PIB sufriera una fuerte caída de 9 %. Además, ocasionó que el desempleo incrementara en unos 400 mil hondureños.
Todo eso ha ocasionado que la migración hondureña tanto interna como externa aumentara en 2022. Por consecuencia, la deportación de hondureños incrementó en un 52 %, según datos oficiales.
Incremento en los índice de pobreza
En los últimos años, la pobreza en Honduras ha mantenido un comportamiento ascendente. Hasta 2019, el país centroamericano mantuvo su índice por debajo del 60 %, pero en 2020 el país presentó una caída histórica en la economía.
De acuerdo con cifras oficiales, Honduras pasó de contar con un 59.3 % de pobreza en 2019 a un 70 % en 2020.
Ese salto abismal llevó a la preocupación de muchos entes, pues provocó desempleo, disminución de ingresos y precarización social de la población.
Para 2021 el panorama cambió para mal ya que el INE informó que hubo un incremento del 3 % en comparación al 2021. Es decir que la tasa de pobreza subió a un 73 %. Lo más preocupante para ese entonces fue que también aumentó la pobreza extrema a un 53.7 %.
En 2022, las previsiones son iguales o peores, pues los índices de pobreza y pobreza extrema se mantienen y amenazan con aumentar.
Sistema neoliberal, una de las principales causas
Ante la notable problemática, Diario Tiempo se contactó con varios sociólogos, quienes coincidieron en que el sistema utilizado por la administración pasada ocasionó que el país se hundiera en la miseria.
Para el analista y sociólogo, Pablo Carías, el modelo económico que se ha utilizado en los últimos años no ha permitido rescatar a Honduras de ese flagelo.
«La pobreza ha ido creciendo, desde hace algunas décadas. Yo diría que una de las principales causas está determinado por un modelo económico altamente concentrador de la riqueza. Me refiero al neoliberalismo», expresó.
Según Carías, ese modelo no es equitativo ni solidario sino que solo permite concentrar la riqueza en pocas manos. «En el caso de Honduras, lo que estamos viendo que el modelo económico ha generado más desempleo, salarios que no cubren las necesidades básicas», enfatizó.
Del mismo modo, el también analista y sociólogo hondureño, Armando Orellana, opinó que el sistema del neoliberalismo ha creado una imagen negativa del país.
«La crisis provocada de los últimos 12 años crea una imagen negativa del país y aplica políticas en materia económica que no plantean las mejores disposiciones para la redistribución de la riqueza sino más bien para la concentración de riqueza», afirmó Orellana.
La guerra entre Ucrania y Rusia trae gran impacto
Según estudios, la guerra entre los países europeos trae graves consecuencias en la economía del país.
Por ejemplo, más del 50 % de los fertilizantes agrícolas importados en Honduras provienen de Rusia y el incremento en el precio de estos insumos está elevando el costo de producción en el país.
Así como afecta en el crecimiento económico en Honduras, también influye para que se recupere del golpe, según explicó Orellana.
«En Honduras el tema de la pobreza ha sido el primer tema de alarma después de la inseguridad. Realmente la situación que se ha vivido en los últimos años por pandemia y Eta e Iota así como la guerra en Ucrania crea un contexto muy poco favorable para la recuperación económica», detalló.
Del mismo modo, Pablo Carías enfatizó que otra problemática de la guerra es que las grandes potencias están colaborando, invirtiendo dinero que podrían utilizar para ayudar a los países subdesarrollados.
«La guerra que se está dando no solo está afectando el comercio también el costo de combustibles. También, las grandes potencias como Estados Unidos está destinando dinero para la guerra que pudiera orientarlo a países pequeños como Honduras», dijo.
Agregó que «todo ese volumen de recursos que se destina para la guerra, si se dedicaran al desarrollo de países pobres podría haber un alivio».
Además de eso, el analista dijo que otro gran detonante es el cambio climático pues Honduras sufre sequía y fuertes lluvias que dejan inundaciones. «Y no solamente eso, sino que el productor cuando tiene cosecha el mercado no le paga los costos de producción», lamentó.
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Nuevo gobierno tiene un gran reto
De acuerdo con Carías, el nuevo gobierno ha mostrado avances para hacerle frente a la pobreza que abruma la nación.
«De hecho, se ve que están haciendo algún esfuerzo, fortaleciendo el Banco de Desarrollo Agrícola, eso es bueno. Se está creando prestamos para pequeños productores, creo que son buenas iniciativas», mencionó.
Por su lado, el sociólogo y recientemente nombrado Director General de la Marina Mercante, Edgar Soriano, explicó que el gobierno tiene ese gran reto de sentar las bases y crear oportunidades para la ciudadanía.
Como funcionario del nuevo gobierno, Soriano aseguró saber de los esfuerzos que han hecho para empezar a darle respuesta al pueblo hondureño.
«El gobierno ha estado en un proceso de transición, pero sé que varias instituciones han preparado sus propuestas para dar oportunidades a la gente y mayor inversión«, explicó Soriano.
«Recuerde que uno de los problemas ha sido la corrupción, la inseguridad jurídica, lo que hace que los inversionistas se vayan. Entonces yo creo que uno de los grandes retos para iniciar es rescatar el Estado, volver un estado de prestigio que genere la confianza y cuando haga eso va a a haber mejores oportunidades, estrategias para generar empleo en área rural y urbana», agregó.
Resultados no efectivos
Por su lado, el analista Orellana dijo que aunque el gobierno esté iniciando a trabajar para mejorar la economía, los resultados han sido efectivos.
«El gobierno está intentando realizar o revertir esas acciones de la política neoliberal. Sin embargo, los resultados no han sido tan efectivas o al menos a la rapidez que lo deseara la ciudadanía en materia de revertir temas como inflación y de crear oportunidades», expresó.
Según comentó Orellana los resultados pueden verse en un mediano o largo plazo, dependiendo de las dinámicas que se empleen. «Pero sí será desalentador darse cuenta que tengamos, en vez de reducción, un incremento de la pobreza a finales del año», expuso.
En ese sentido, el analista enfatizó que, de no presentar buenos resultados a final de año, el gobierno debe tomar acciones más severas.
«Yo creo que tendría que verse obligado el gobierno a revisar otras acciones un poco más agresivas para ir creando esas condiciones paulatinamente», señaló.
Finalizó diciendo los gobernantes acostumbran a dar propuestas, pero al momento de ejecutarlas se dan cuenta lo difícil que es. «No es tan fácil y a veces muchos se quedan en declaraciones o se hace a un paso muy lento. Sin embargo, hay que tomar en cuenta que se está empezando un año de gobierno y hay que esperar las acciones que se proyecten a partir del próximo año», concluyó.
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