TEGUCIGALPA, HONDURAS. Mientras unas familias están compartiendo en sus hogares, muchas otras familias hondureñas, que perdieron sus casas durante las tormentas, están pasando Navidad en los albergues habilitados por las autoridades.
«Jamás imaginamos esto o que íbamos a perder nuestras casas. Queríamos pasar con nuestras familias, pero lastimosamente tenemos que estar aquí porque perdimos nuestras casas», dijo Griselda Mendoza, una madre de familia que actualmente habita el albergue de la Villa Olímpica en Tegucigalpa.
Así como Mendoza, muchas otras familias están pidiendo reubicación para poder tener un hogar.
Denia Argentina Rodríguez, una hondureña de la tercera edad que vive actualmente en el albergue de la Villa Olímpica en Tegucigalpa, contó a un noticiero local que siente tristeza al saber que perdió su hogar y que no tienen una respuesta de nadie.
«A saber cuando nos saquen de aquí cómo vamos a hacer porque ni el presidente, ni el alcalde se asoman aquí. Yo vivo pobremente, mi casa estaba toda podrida, pero la Navidad pasada sí se miraba bonito; con mi arbolito humildemente, pero en mi casita y no aquí», expresó Rodríguez entre lágrimas.
Además, con su voz quebrantada manifestó que ni siquiera con el paso del huracán Mitch se le cayeron los muros de su hogar. «Nunca pensamos tener esta tristeza porque sea como sea su casita, sea humilde, pero pasa feliz aunque sea solo con su arbolito, con su nacimiento», manifestó.
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Asistencia del gobierno
Por otro lado, otra mujer afectada solicitó la ayuda del gobierno, ya que ni siquiera tienen en dónde cocinar.
«Yo pedí que nos ayudaran con una estufa para cocinar de Las Casitas y no nos han traído nada», aseguró. También explicó que «vivía a orilla de quebrada y no puedo regresar», dijo la dama afectada.
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