ISLAS DE LA BAHÍA. El martes en horas de la noche una embarcación con tres tripulantes, dos hondureños y un italiano, quedaron a la deriva en alta mar. Muchos se imaginaron lo peor hasta ayer viernes (26/5/2017) que fueron localizados.
Los hondureños fueron identificados como: Wilfredo Víctor James, capitán de la embarcación y Manuel del Arca. Asimismo, el italiano de nombre Marco Ferreti.
Aunque estuvieron a la deriva durante casi tres días, afortudamente fueron encontrados con vida para contar esa odisea.
Muchas cosas pasaron durante esos tres dias de incertidumbre. Pero todo nos lleva a centrarnos en el capitán de la embarcación. Wilfredo James es originario y residente de Utila y desde hace tiempo se dedica a brindar servicios de pesca y tours a los turistas.
Sin embargo, su experiencia en el área no fue suficiente para divisar que su amado bote fallaría en pleno viaje. Ms Lucy era su compañera de trabajo favorita y aunque lo acompañó durante mucho tiempo, ésta se le apagó cuando más la necesitaba.
Según informaron las autoridades, el motor falló y la última comunicación fue el martes a las 10 de la noche. En ese momento los tripulantes indicaron que se encontraban a 39 millas de los Cayos de Utila.
Hasta ahora ninguna declaración ha sido brindada por ellos y en el caso de James, su familia y su negocio soñado, los esperaban en casa.
MS LUCY
Wilfredo Víctor James abrió su negocio de comida «Relapse Restaurante» el pasado mes de febrero y aunque seguía dedicándose a los tours y la pesca, su prioridad era el mencionado lugar.
Un hombre de familia con hijas independientes y amorosas que lo esperaban con los brazos abiertas, fue quizá su motivación para soportar estos días.
Wilfredo, un hombre de trabajo y entregado a lo que le apasiona: navegar. Con experiencia en la navegación, no solo se centraba en la capitanía, también capacitaba a otros jóvenes y adultos interesados.
Su único error fue pensar que su compañera de viaje «Ms Lucy» sería eterna. Según trascendió, el bote, además, no llevaba las indumentaria requerida: chalecos salvavidas, extintor, botiquines, entre otros.
RESCATE
Mientras las familias de los tres tripulantes estaban en casa con pánico por desconocer el destino de sus seres amados, equipo marítimo y aéreo los buscaba noche y día.
Hasta que llegó un punto en el que se planeó solicitar ayuda a Estados Unidos para dar con su paradero. Fue ahí que los encontraron. Miembros de la Fuerza Aérea Hondureña identificaron el bote.
Los tres hombres mencionados anteriormente, empezaron a saltar y dar señales al piloto; sabían que su rescate había llegado. Casi tres días sin agua purificada y comida, seguramente dieron gran lección a estos tres hombres.
Por fin este día en horas de la mañana, los tres náufragos llegaron a Utila. Entre alegría y abrazos sus familiares ya les esperaban.
