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miércoles, diciembre 4, 2024

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Redacción. Autoridades policiales y fiscales ejecutaron ayer viernes una inspección en el Centro Pedagógico de Internamiento «Nuevo Jalteva» para esclarecer la muerte del menor de 13 años el pasado martes 18 de junio del presente año.

El menor Moisés Daniel Cerrato Lazo fue encontrado colgado de una viga y con señales de tortura en el interior de uno de los módulos. Él había ingresado a ese centro en diciembre pasado por cometer extorsión y portación ilegal de armas.

Según informaciones preliminares, la víctima murió estrangulado por sus compañeros, supuestamente por cosas que «había contado», las cuales generaron la incomodidad de los demás internos.

Menor infractor
Al menor lo ultimaron en uno de los cuartos del lugar.

El portavoz de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic), Jorge Galindo, indicó que como parte de este proceso, la Fiscalía del Delito Contra la Vida del Ministerio Público realizó el levantamiento de algunos elementos de prueba que podrían fortalecer la línea de investigación.

“También se han efectuado otras diligencias administrativas propias de esta investigación y asimismo se continuarán trabajos investigativos a fin de poder esclarecer este hecho”, detalló.

Jorge Galindo
Jorge Galindo, portavoz de la ATIC.

Lea también: Informe forense confirma causa de muerte de menor infractor en «Nuevo Jalteva»

Derechos humanos en alerta

Por el caso, el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) indicó que el centro «Nuevo Jalteva» no reúne los estándares internacionales en materia de justicia juvenil, para que los niños y adolescentes privados de su libertad puedan reeducarse e insertarse en la sociedad.

«Lamentamos profundamente que el adolescente, que cumplía la medida privativa de libertad en ese Centro, bajo la custodia del Estado, haya perdido la vida», externó Cándida Maradiaga, coordinadora de la Defensoría de la Niñez del Conadeh.

Maradiaga expuso que «para nosotros es altamente preocupante que se pierda la vida de un joven de 13 años». El menor «tenía posibilidades de reeducarse, de insertarse favorablemente, ya que tenía el apoyo de una familia», añadió.

Por ello, aseguró que lo ocurrido «nos debe poner en alerta y, sobre todo, a las instituciones responsables de administrarlos». Ante esas situaciones, se deben de tomar «medidas urgentes y evitar que más jóvenes sigan perdiendo la vida».

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