REDACCIÓN. En las calles de Roatán, un migrante llamado Kevin ha encontrado una forma creativa y sabrosa de ganarse la vida: vendiendo arepas. Originario de Venezuela, Kevin ha llevado consigo el sabor y la tradición de las arepas a su nuevo hogar en Roatán, donde ha conquistado los paladares de residentes y turistas.
Este emprendedor migrante, identificado en TikTok como @medikelmusic, no solo se dedica a vender arepas, sino que también comparte su experiencia en Roatán a través de las redes sociales.
Recorriendo las calles de Roatán, el venezolano ofrece sus arepas a los transeúntes, cautivando a muchos con su particular estilo. De manera creativa, Kevin atrae a los clientes con frases como: «Van las arepas, la colombiana dice ‘hágale, hágale’ y la venezolana dice: ‘hay chamo'».
[jwp-video n=»1″]
Este joven no solo llama la atención de los paseantes, sino que también deja una buena impresión en quienes prueban sus deliciosas creaciones. «Mmmm qué rica está», confesó un reportero que lo entrevistó y decidió comprarle una arepa.
El venezolano ha recibido el apoyo de los residentes y turistas que llegan a Roatán, por lo que el joven ha agradecido a los compatriotas a quienes los invita a seguir degustando del platillo típico de su tierra natal. Además, ha decidido regalar arepas a algunos hondureños en la calle, para que conozca el sabor del rico platillo.
El joven desea triunfar en Honduras
Este migrante venezolano ha elegido Roatán para vivir y no desea continuar su camino hacia un país desarrollado. En la bella isla, el indocumentado ha trabajado en varios negocios, además de que rapea por las calles, para conseguir más finanzas.
Sus seguidores en TikTok le han preguntado por qué quiere permanecer en Honduras, considerando los altos niveles de pobreza y pocas oportunidades laborales.
El chico respondió que su único deseo es triunfar con su talento como rapero. «Yo decido migrar a Honduras y no a otro país porque yo tengo mi sueño y es vivir de mi música, de mi arte«, explicó.
Confesó que no sabe cómo los hondureños recibirán su música o si le darán la espalda, pero tiene la meta de sobresalir en la nación catracha con su talento. «Ustedes dirán: «bueno, y crees que los catrachos te van apoyar»… no lo sé, eso lo decide el tiempo, pero mi sueño como tal es triunfar con mi arte, no es llegar a China o a Japón porque si yo quiero lo puedo, pero ese no es mi sueño», manifestó.
