TEGUCIGALPA, HONDURAS. Según estadísticas de autoridades migratorias, el número de hondureños migrantes podría aumentar a tal grado de registrar hasta mil salidas diariamente en busca de cumplir el «sueño americano«.
Las estimaciones han preocupado a expertos en migración, quienes aseguran que este problema crece y crece, lo que podría desencadenar todo tipo de consecuencias negativas.
La defensora de los derechos humanos y experta en temas migratorios, Itsmania Platero, expresó que es muy importante que las autoridades hagan algo para de algún modo disminuir la tasa de migración.
«La crisis migratoria se ha agudizado desde 2020 a la fecha y además de eso también se ha agudizado la situación y las causas por las que la población migrante está saliendo», comentó Platero.
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Muerte de migrantes hondureños
Los desafíos que suelen haber en el camino, como las extremas condiciones del clima, así como grupos criminales que vigilan las fronteras han provocado la muerte de varios compatriota.
El coordinador del Observatorio de Migraciones Internacionales de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), César Castillo, afirmó que muchas veces algunos migrantes terminan “desapareciendo” antes de llegar a su destino.
“Eso es de lo que nos damos cuenta, de los compatriotas que murieron, pero también hay muchos desaparecidos que no sabemos de ellos”, dijo César.
En los últimos días, más de 10 migrantes hondureños han muerto en diversos accidentes, uno de ellos fue en un tren en el cual murieron 4 compatriotas.
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Naufragio en México
Seis hondureños perdieron la vida luego de sufrir un naufragio en Veracruz, México, entre ellos falleció un menor. Además, hubo cuatro rescatados y otros que continúan como desaparecidos.
Hasta ahora las víctimas han sido identificadas como Tania Yadira Espinoza López, Osman Javier Perdomo López, Óscar Alexander Argueta, un niño de 3 años y alguien más del cual no se sabe nombre.
Los sobrevivientes responden a los nombres de Wilmen Escoto, de 41 años; José Perdomo Barahona, de 16; Francisco Castañeda, de 39, y Mauricio Galdámez Espinoza, de 12.
El lunes ocurrió la tragedia en la que un grupo de 11 hondureños que buscaban llegar a la frontera sur de Estados Unidos, naufragaron en las costas de Tonalá, municipio de Agua Dulce, estado de Veracruz, México.
Por la noche se reportó el hallazgo de los primeros tres cadáveres y cuatro sobrevivientes, entre ellos dos menores de edad.
Los migrantes buscaban alcanzar el sueño americano, a través de una modalidad que, de acuerdo a vecinos del lugar, no es nueva. Coyotes ya la habían usado para el tráfico de personas, sin embargo, rara vez ocurren tragedias como esta.
La embarcación salió de un caudaloso río que desemboca en el Golfo de México. Los testimonios de los sobrevivientes revelaron que el conductor de la lancha, también migrante, viajaba a alta velocidad y las fuertes olas del mar hicieron que volcara la embarcación.
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