Una investigación científica le atribuye una nueva propiedad medicinal a la miel. Untar con este alimento una úlcera de una persona diabética ayudaría a prevenir la necesidad de amputar un pie infectado.
La miel, que se hizo fama de alimento perfecto gracias a su sabor y a sus cualidades nutricionales y terapéuticas, suma así otra cualidad.
Esa terapia consiste en introducir gran cantidad de miel dentro de la herida luego de que se remueva la piel muerta y las bacterias. La miel mata las bacterias porque es ácida, y evita complicaciones de resistencia que se encuentran en los antibióticos tradicionales.
Los diabéticos tienen circulación deficiente y disminuida su habilidad para combatir infecciones y, por ende, las úlceras pueden ser difíciles de tratar.
Las terapias con miel son utilizadas para tratar úlceras en Nueva Zelanda y como una forma alternativa de medicina en Europa, pero han sido menospreciadas en Estados Unidos.