TEGUCIGALPA, HONDURAS. El doctor Roberto Antonio Matamoros Morales, coordinador académico del posgrado de Oftalmología, docente del Departamento de Fisiología de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y médico asistencial del área de Oftalmología del Hospital San Felipe, advirtió ayer, miércoles, sobre los problemas visuales en las personas como efecto colateral de la pandemia de COVID-19.
A través de medios locales, el profesional de la medicina explicó que a raíz del confinamiento, tanto adultos como niños adoptaron nuevos hábitos en sus rutinas diarias.
Esos nuevos hábitos, según el galeno, incluyen el teletrabajo, clases virtuales, reuniones a través de las diferentes plataformas y además las personas acceden más a las propuestas de entretenimiento online para todas las edades.
Eso hace, según el médico, que se pase más tiempo frente a la computadora, tabletas, celulares o demás equipos de pantallas digitales y, por ende, que se dañe la vista.
De acuerdo con un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2050, una de cada dos personas en el mundo será miope.
Asimismo, estima que, debido al actual escenario sanitario, se podrían acelerar esas proyecciones como resultado de los factores ambientales que se relacionan con la masificación del uso de dispositivos tecnológicos, pese a que el origen de la miopía es principalmente hereditario.
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“Tenemos la costumbre de que después de realizar 8 horas de teletrabajo, o en las clases, en nuestras horas de descanso agarramos el celular para distraernos. Entonces, no estamos haciendo nada. Nuestra vista no descansa y lo que hacemos es pasar de un dispositivo a otro”, afirmó el doctor Morales.
Más de 200 niños y jóvenes atendidos por problemas en los ojos
En ese sentido, el galeno manifestó que durante los últimos 6 meses atendió más de 200 niños y jóvenes universitarios con problemas de la vista.
De igual forma, el también investigador dijo que “los familiares no traen a sus niños por sospecha de COVID-19, sino por los problemas que les ocasiona el uso excesivo de la computadora”.
Ante esa situación, indicó que durante la pandemia, es en la consulta en el Hospital San Felipe donde más niños atiende por problemas visuales. «Lo que les pregunto a los padres, es qué es lo que hacen los niños durante los minutos de descanso y muchos dicen que siguen esos malos hábitos de ponerse a jugar con el celular”, señaló el doctor.
Desde una perspectiva más general, explicó que entre los síntomas más frecuentes que presentan los pacientes están:
- Picazón en los ojos
- Visión borrosa
- Dolor de cabeza
- Cansancio
- Lagrimeo
- Tendencia al sueño y ojos rojos lo que puede repercutir en abandono de tareas o problemas de acomodación.
“Y de hecho hay estudios que indican que muchas veces a raíz de estos síntomas, las personas abandonan la actividad que hacen e incluso se duermen”, aseguró.
Igualmente, el coordinador del Posgrado de Oftalmología refirió que se han hecho estudios con relación a lo que le sucede en la vista de los jóvenes universitarios y estos indican que un 38 % presentaban estos síntomas.
Entretanto, otras investigaciones desarrolladas en Inglaterra, revelan que un 22 % de la población joven presentó estas características.
Sin embargo, dejó claro que no es que, las personas van a quedar ciegas, sino que pueden empezar a mostrar sintomatología y su vista empeorará.
¿Qué sucede al estar frente a la computadora?
Por otra parte, el especialista explicó que, normalmente cuando estamos en la computadora no parpadeamos, perdemos ese reflejo, eso ocasiona que la córnea se seque y por ende una mayor fatiga visual.
«En este proceso se daña el esfínter pupilar o iris del ojo porque su función es hacerse grande o pequeño, dependiendo de la luz recibida”, indicó el experto.
Asimismo, agregó que al estar expuesto al brillo de la computadora, hay problemas fisiológicos de lo que ocurre al ojo.
«Uno de esos problemas visuales que deja la pandemia es la acomodación del ojo porque el ojo y la pupila deben estar haciéndose grande o chiquito y eso depende de la cantidad de luz que entre en nuestro ojo. Finalmente el paciente, aunque use o no anteojos, puede tener dolor de cabeza y cansancio”, sostuvo.
Igualmente, expuso que el esfínter pupilar funciona para constreñir la pupila ante luz brillante (reflejo pupilar) o durante el reflejo de acomodación. Sus dimensiones son de cerca de 0.75 mm de ancho por 0.15 mm de espesor.
Consejos para el uso prolongado de la computadora
- Parpadeo constante: estudios concluyen que cuando estamos en la computadora casi no parpadeamos.
La literatura indica que se debe parpadear no menos de 16 o hasta 36 veces por minuto. “El parpadeo es una manera como la lágrima nos lava y nos limpia la superficie ocular. Hay aportes investigativos que dicen que parpadear produce ciertas enzimas o medicamentos que nos pueden proteger de ciertas bacterias”, aseguró.
- Ajuste de pantalla. La distancia correcta debe ser de 40 a 75 centímetros de la cara.
“Es una manera en la cual podemos tener un reflejo de acomodación que nos puede ayudar a evitar los síntomas característicos que es el dolor de cabeza. Incluso, hay otros que dicen que la pantalla se debe colocar de espalda a la ventana, para evitar el exceso de luz”, agregó el doctor Matamoros.
2.Agrandar letras del monitor: la posición de los ojos debe estar casi a nivel de la pantalla.
“Las letras se deben poner en grande, para que sus ojos no vean para arriba ni abajo de la pantalla”, concluyó.
Fuente: Presencia Universitaria.
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