TEGUCIGALPA, HONDURAS. Es normal ver a Mauricio Kawas caminando muy a prisa por los pasillos del segundo piso del edificio Rosenthal, con papeles en mano que seguramente son el guión de uno de los programas que presenta en su canal, Todo Deportes Televisión (TDTV), y también con su teléfono celular.
Cabe resaltar que al salir de la oficina, uno de mis compañeros se enteró que iba a una entrevista con Kawas y me pidió acompañarme. Al llegar al lugar, se tomó una foto con el comunicador y luego regresó a sus labores.
Jugando la potra en las calles del barrio Río de Piedras de San Pedro Sula pasó la niñez el presentador deportivo. “Mi infancia fue muy buena, en el barrio Río de Piedras en San Pedro Sula cuando no había pavimento. Estábamos cerca de la Escuela pública Dionisio de Herrera y teníamos un campo que no tenía cerco, pero cuando no nos dejaban entrar, entonces jugábamos en la calle. Llegaba rayado a la casa y todo raspado. Se daba gusto uno”, recordó.
A pesar de que su padre murió cuando él tenía 11 años, recuerda que siempre tuvo una muy buena relación. Entre la piscina de los domingos en el Hotel Bolívar y en la tardes, asistiendo al histórico Estadio Morazán, Kawas relató que se le vienen imágenes de su padre.
“Hoy el Hotel Bolívar no es lo que era antes, pero en aquel entonces se hacían muchas barbacoas. Estamos hablando como de 1973-1974. Por cierto, ahí se hospedaban el Olimpia, Motagua y Universidad”, apuntó.
Y añade que: “Era habitual que a la hora del almuerzo nos encontráramos a los jugadores del Olimpia y pidiéramos autógrafos. En ese tiempo no había cámaras, pero sí tengo esos buenos recuerdos”.
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Mauricio Kawas: “Fui un estudiante normal”
Muchos mensajes caían al celular de Kawas, sin embargo, él no interrumpió la conversación en ningún momento. Muy activo, dinámico, pero a la vez, se tomaba unos segundos para encontrar las palabras correctas y responder a cada interrogante.
Kawas aseguró que siempre fue un estudiante promedio, con notas de 80, ni sobresaliente, pero tampoco malo. “Estuve en la International, pero no estaba como ahora”, señaló.
“Las travesuras habituales en el colegio, era un ambiente muy diferente al de ahora. No tuve novia en el colegio, era desafortunado en ese asunto. Éramos una sección pequeña, unos 30 compañeros entonces fue una relación de amistad muy bonita. Nos reunimos en San Pedro el pasado diciembre y fue bonito porque yo siempre era el resistente a no asistir”, manifestó.
Asimismo, aseguró que en los tiempos de disco y salidas nocturnas fue muy bailarín: “Bailaba bastante salsa”, confesó. Además, narró que unos años atrás, si en San Pedro Sula alguien no bailaba merengue, no tenía siquiera posibilidades. “Tengo días de no echarme un merengazo fijate. Que no me escuche mi esposa porque ya me va a decir que vayamos a bailar”, dijo entre carcajadas.
Una de las discusiones más grandes y probablemente que nunca acabarán en la vida será el tema de qué música es la mejor de la historia.
Ante eso y a pesar de aceptar ser un empedernido bailarín, Mauricio mencionó que también gusta mucho del rock británico, escuchando bandas como Depeche Mode o artistas como Sting, Prince, Phil Collins, Robert Palmer, entre otros. “Esa música de los ochentas fue casi perfecta”, añadió.
No solo fútbol, le gustan otros deportes
Se conoce que el director general de TDTV es una de las voces oficiales del periodismo deportivo en el país. Sus comentarios y análisis sobre fútbol son muy comentados en redes sociales, ya sea que los seguidores o detractores estén o no de acuerdo con sus palabras.
No obstante, el también padre de cuatro hijos, confirmó que es seguidor del fútbol americano sobre todo en su etapa de post temporada, aunque en la actual no le ha dado mucho seguimiento.
Además, recordó una anécdota con el básquetbol. “El baloncesto no me apasiona, aunque debo reconocer que fui con mi hijo cuando él estudiaba afuera a ver un partido de los Bulls porque quería conocer la sensación de cómo se ve un juego desde la arena y te digo, es un espectáculo, sinceramente. El manejo de los estadounidenses de sus deportes para el público es impresionante. No te podes aburrir. Me falta ver una de béisbol y la gente me dice que tampoco me voy a aburrir”.
Allá por los años 70’s, en Honduras se transmitían los partidos de béisbol bajo la voz del irreemplazable, Raúl Agüero Neda (QDDG), quien según varios periodistas deportivos de la vieja escuela, era fantástico.
De esa forma, Kawas no se quedó atrás y recordó que comenzó a sentir simpatía por el deporte que inmortalizó como el mejor jugador de béisbol de todos los tiempos a George Herman Ruth, mejor conocido como “Babe Ruth” o “El Gran Bambino”.
“Me gusta mucho el béisbol, allá por los setentas se me despertó más esa afición porque aquí se trasmitía con el doctor Agüero Neda que narraba los partidos. Era un narrador que lo hacía por afición y lo hacía con una calidad impresionante, lo ponían en cualquier cadena de los Estados Unidos y no desentonaba”, sostuvo.
Cupido tocó a la puerta
Era el año de 1991, cuando un sobrino o primo en segundo grado del narrador, le presentó a una mujer que un año después arrebataría la soltería a Kawas.
“A mi esposa la conocí por uno de mis sobrinos o primo en segundo grado que hizo de cupido, él armó la salida. Nos conocimos allá por la mitad del 91 y al año nos casamos, tenemos cuatro hijos, el mayor que trabaja conmigo y las últimas tres que son mujeres”, resumió.
Reveló que como padre ha sido muy abierto con sus cuatro hijos. «Yo creo que uno con los hijos se tiene que llevar igual, con el mismo grado de confianza en todo y como ellos ya están grandes pues salimos a cenar, tomamos algo en la casa, o asado que eso acerca mucho a las familias”.
Se graduó en Química y Farmacia, pero…
A pesar de ser conocido por su carrera en la televisión, en los deportes y por su evolución con el programa de los campeones, Kawas se graduó como licenciado en Química y Farmacia. Profesión que nunca ejerció.
“Yo ya sabía que iba a hacer esto. Saqué una carrera porque ocupaba una que no fuera periodismo, porque en ese tiempo, las opciones de un periodista con título no eran tan amplias. Había tres o cuatro periódicos, hoy el que estudia periodismo tiene muchas opciones. Yo sentí que para hacer lo que yo quería, que era ser narrador, no necesitaba pasar por la carrera de periodismo, un error, porque seguro hubiera aprendido más rápido”, reveló.
El narrador de los campeones
Honduras se estaba jugando la clasificación a la primera Copa de Oro de la historia contra Panamá. En la cual, dicho sea de paso, llegó hasta la final que perdió contra el anfitrión, Estados Unidos.
En el partido de ida Honduras cayó derrotado en la ciudad de Panamá. La vuelta, estaba programada para el Estadio Morazán de San Pedro Sula, partido que quedó marcado en la memoria de Mauricio.
“Recuerdo el Panamá – Honduras, partido de vuelta clasificatorio para la primera Copa Oro en el 90 o principios del 91. Honduras había perdido en la ida y estaba dirigiendo un español, López Nonvela. Recuerdo que Cocoy (Abudoj) lo separó por la derrota porque fue penosa, Panamá todavía no era una potencia. Nombraron a Flavio Ortega (QDDG) y la vuelta era en el Morazán. Me asignaron a mí junto a Salvador (Nasralla). Él llegaba de viaje y llegaba a San Pedro Sula, pero tuvo problemas con el vuelo, entonces no podía estar”, inició contando.
“Yo estoy en el palco con Jesús Velez Banegas que comentaba unos partidos con el Cinco y en estudio está Kilvett (Bertrand) con alguien más, acá en Tegucigalpa. Entonces la decisión pasaba porque el partido se narraba acá (TGU) o yo en San Pedro Sula, y nos avisan que lo narramos allá”, continuó.
«Fueron 90 minutos increíbles porque el estadio estaba a reventar, el partido termina 0-0 en el primer tiempo. Caralampio Vallejo estaba en la banca, lo meten en el segundo y una remontada descomunal, 3-0. Una ocasión increíble”, recordó.
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Cortita y al pie con Mauricio Kawas
¿Cómo toma los comentarios en redes sociales?
Los comentarios en redes sociales los tomo normal. Yo lo único que no permito es el ataque racista, lo que viene con un tinte racista es inadmisible.
¿Primer juego que narró?
El primer juego que narré fue en San Pedro Sula. Esa tarde que llegó el doctor Daniel Dávila me dijo que me iba a dar 15 minutos. «Aprovéchelos», me dijo. No estoy seguro, pero creo que fue un Marathón – Olimpia.
¿Comida favorita?
Me gusta mucho la comida mediterránea, italiana, árabe; hay mucha similitud. Si me das un buen vino y una buena pasta, me tenes tranquilo un buen rato.
¿Pasatiempos?
Me gusta el cine muchísimo. Cinema Paradiso (1988) es la mejor película que he visto.
¿Países que conoce?
Me impresionó mucho Emiratos Árabes. Me gustó mucho España, solo pude estar ocho días porque era viaje de trabajo, pero lo que pude ver, me encantó. No conozco muchos países, me gusta viajar, pero no es algo que me quita el sueño
¿Nuevos proyectos?
Lo más importante ahora es la Liga y lanzamos una nueva plataforma (TDTV ahora será el encargado de transmitir los partidos de la Liga Nacional que están bajo los derechos de Canal 11).
¿Le interesa la política?
Doscientos por ciento que no quiero entrar en la política. No se me ocurre cambiar lo que tengo ahora por algo que en nuestro país está completamente desprestigiado.
¿Barcelona o Real Madrid?
En Europa yo soy Juventus y pongo a pelear a los Barca y Madrid, ese es mi segundo pasatiempo jajaja, bromas.
¿De qué equipo es aficionado en Honduras?
Fui aficionado a un equipo en Honduras. Pero hoy el tema es que estas en un trabajo en donde tenes los derechos de determinados equipos y el comentarista deportivo es como el futbolista, quiere estar en la final, por eso me alegré cuando Real Sociedad llegó a aquella final contra Real España; igual cuando lo hace Marathón. Todo narrador quiere relatar una final.