REDACCIÓN. La entidad no gubernamental estadounidense «Water for people» informó este día que más de siete millones de hondureños no cuentan con el servicio del agua potable segura.
David Ramos es especialista en comunicación y captación de fondos de Water for people Honduras. Él dijo, en el marco del Día Mundial del Agua, que «cerca de 7.5 millones de personas no tienen derecho al agua potable segura», esta cifra representa 77,3 % de los 9,7 millones de habitantes.
Según Ramos, en Honduras muchos niños menores de 5 años mueren por enfermedades gastrointestinales. Esos padecimientos se vinculan con la falta de agua potable. Además, muchos sacrifican la escuela por la necesidad de buscar el vital liquido.
También, el especialista tildó de «alarmante» el hecho de que tantas personas no tengan acceso al agua potable. Los hondureños tienen que pagar altos precios a camiones cisterna o recurrir al agua de pozos, que en su mayoría están contaminados.
El costo del barril de agua potable oscila entre 60 a 70 lempiras (de 2 a 3 dólares). Es un precio que en muchas ocasiones resulta casi inalcanzable para la población, donde más del 70 % vive en pobreza.
Se necesitan más represas
La demanda del vital liquido en Honduras es de unos 2.300 hectómetros cúbicos, de los cuales apenas 87,000 hectómetros cúbicos están cubiertos. La demanda no es satisfecha en relación a la cobertura total de acceso, ya que aún existe una brecha grande entre el área urbana y rural, según cifras oficiales.
De acuerdo con el Ente Regulador de los Servicios de Agua Potable y Saneamiento (Ersaps), se necesita una inversión de alrededor de 2.300 millones de lempiras, para la construcción de más represas, que garanticen el acceso al agua por parte de los ciudadanos.
En 2021 el Banco Centroamericano de Integración económica (BCIE) anunció que apoyaría a Honduras con una inversión de 5.8 millones de dólares para la construcción de 6 represas.
Los proyectos se ubicarán en los departamentos de Atlántida, Olancho, El Paraíso, Choluteca, La Paz y Francisco Morazán, donde se localiza Tegucigalpa, la capital.
Ramos hizo un llamado de «esperanza» al pueblo hondureño. Además, recalcó que debe ser un trabajo en conjunto entre organizaciones no gubernamentales y el Gobierno de la República para solventar la «crisis».
«Aquí es de hacer acciones concretas y cada quien pone su granito de arena», declaró el representante de la organización, en su participación en Tegucigalpa.
La capital de Honduras tiene unos 1,5 millones de habitantes. Recordaron el Día Mundial del Agua clamando por ella, por la falta del líquido en sus hogares, problema que también sufren otras ciudades importantes del país.