DE MUJERES. Es importante que las manos estén suaves al tacto, pero también que se vean sanas. Si no las proteges, serán más vulnerables a las infecciones, la contaminación ambiental y las arrugas.
Entonces si quieres tener unas manos mejores que la seda y no sentirlas ásperas al tener contacto con los objeto, te recomendamos que prestes atención y cumplas con los siguientes consejos:
Humecta
Es quizá, el principal consejo para tener las manos suaves verdaderamente. Hay que humectarlas todos los días, para que la piel no esté reseca y quebradiza, y en cambio mantenga su aspecto saludable.
Usa alguna crema hidratante todos los días, si no puedes usar algún remedio natural para conseguir el mismo efecto. Por ejemplo, aceite de coco con unas gotitas de limón pueden convertirse en una loción perfecta para las manos.
Protege tus manos del sol
En general tenemos instalada la costumbre de proteger el rostro del sol. Con lentes, con gorros y, sobre todo, con protector solar, lo puedes lograr.
Pero a veces nos olvidamos que nuestras manos también están en permanente contacto con los rayos del sol, y por eso, también debemos cubrirlas.
Al menos, no debemos olvidarnos de aplicar un poco de loción para el sol todos los días. Esa será, quizá, una de las medidas más importantes que podemos tomar para unas manos suaves, pero sobre todo, para cuidar la salud de la piel.
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Usa guantes
Muchas veces realizamos tareas con las manos descubiertas que podríamos hacer con guantes. Lavar los platos, los pisos, la ropa que se lava a mano son quizá los casos más claros, pues el agua y los productos químicos de limpieza son enemigos de las manos suaves.
Verás que la simple costumbre de usar guantes para todas esas tareas domésticas ya cambiará increíblemente el aspecto de tus manos. También sirve usar guantes para tareas de jardinería o de construcción, por poner solo algunos ejemplos.
Exfóliate más seguido
La exfoliación, como sabrás, ayuda a eliminar las células de piel muertas y por eso, luego de una exfoliación la piel se siente mucho más suave.
No reduzcas únicamente al rostro la exfoliación. Si las cremas exfoliantes te resultan poco ecológicas y costosas, hacer un exfoliante casero es súper sencillo.
Puedes lograrlo combinando partes iguales de aceite de oliva y azúcar.
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