Luis Redondo, el origen de la discordia en el PSH

Tegucigalpa, Honduras. La división actual del Partido Salvador de Honduras (PSH), que al inicio de la primera legislatura llegó al Congreso Nacional (CN) con diez diputados, tiene su origen precisamente en uno de ellos: Luis Redondo, se «divorció» del designado presidencial y presidente del PSH, Salvador Nasralla, en el segundo año de gobierno.

Todo inició en 2022, cuando Luis Redondo votó a favor de la nueva Ley de Junta Nominadora de candidatos a magistrados para la Corte Suprema de Justicia (CSJ), en contra de la postura de la bancada del partido que se oponía a esta determinación, provocando que Nasralla calificara a Redondo de «traidor».

“No me puedo quedar callado, en la aprobación de la ley de la Junta Nominadora nuestra bancada votó totalmente en contra y Redondo fue el único que estuvo a favor. Traicionó los ideales del PSH”, lamentó Nasralla en ese momento.

La decisión unilateral de Redondo marcó el inicio de un distanciamiento con Nasralla que se mantiene hoy en día. Eso derivó a que incluso se cruzaran declaraciones, cobrándose mutuamente un dinero con el que ambos aseguran haber fundado el partido.

La disputa, ventilada públicamente por ambos, hizo que los integrantes de la bancada del PSH se posicionaran inicialmente a favor de Nasralla y desconocieran a Redondo como uno de sus miembros.

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Distanciamiento

La evidente desintegración del PSH, iniciada por el unilateralismo de Redondo, no obstante tuvo un nuevo capítulo cuando Ligia Ramos presentó su renuncia a ese instituto para convertirse en diputada independiente, bajo el argumento de no compartir las posturas del partido.

Esta decisión tuvo su respuesta por parte del propio Nasralla: «Para nosotros hoy es un día un poco de fiesta, porque Ligia durante estos dos años estuvo acompañando las decisiones del partido Libre. Ella, declaradamente ha sido una persona que está de acuerdo con el partido Libre, fue de las personas que me convenció para hacer la alianza, fue la primera persona que me habló de esa Alianza en mayo de 2021″, le reprochó el designado en su momento.

Sin embargo, el cisma dentro del partido continuó cuando José Manuel Matheu, diputado de ese instituto político que cedió su cargo bajo permiso para ejercer la titularidad de la Secretaría de Salud al inicio del gobierno, volvió al CN tras ser cesado por la presidenta Xiomara Castro.

En la primera sesión del 2024, tras casi cinco meses de parálisis legislativa, Matheu retornó al hemiciclo. Sin embargo, ocupó un lugar alejado del resto de integrantes de la bancada de su partido.

Y es que, cuando Matheu aún era ministro, su colega y también congresista del PSH, Carlos Umaña, miembro de la Comisión de Salud del CN, criticó su gestión señalando que «le quedó grande la camisa», debido a la crisis en que se encontraba esa secretaría bajo su gestión.

Esto desató una confrontación pública entre ambos, haciendo que sigilosamente Matheu se distanciara de la bancada. Esto tuvo su colofón con las críticas que recibió de la diputada Claudia Ramírez, que lo animó a definir su postura a favor o en contra del PSH.

Polémica decisión

En esa misma sesión, los también congresistas del PSH, Tomás Ramírez y Osman Chávez, aceptaron cargos en la Junta Directiva del CN para el periodo 2024-2026 por invitación precisamente de Luis Redondo.

Algunos de sus compañeros de bancada los tildaron de «tontos inútiles», considerando su decisión como una «falta grave» que podría provocar su destitución del partido.

No obstante, en declaraciones a Diario Tiempo, Tomás Ramírez pidió a sus compañeros respetar su decisión, puesto que se trata, dijo, de una aspiración personal.

«Algunos compañeros deberían respetar mi integración a la Junta Directiva porque el pueblo hondureño nos conoce. Nosotros no estamos en la Junta Directiva por beneficios de fondos ni vehículos…», dijo.

En tal sentido, la nueva Junta tomará posesión el 25 de enero, cuando se instale la tercera legislatura, y pasará de 19 a 22 diputados.

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Una plataforma 

En tal sentido, Salvador Nasralla señaló que tanto Redondo como Ramos, Matheu, Ramírez y Chávez dejaron ya de formar parte del PSH. «Tomaron el camino equivocado», dijo.

«A ellos ya no los considero como representantes del PSH, dijo del designado presidencial en declaraciones para Hoy Mismo. «Ellos no entienden que están colaborando para que la gente dentro de unos seis años tenga el sueldo mensual de 150 lempiras. Las familias van a tener que repartirse un cuarto de pollo en un mes, que es lo que vi en Cuba y Venezuela», agregó.

Es así que Nasralla aseguró que el Tribunal de Honor del PSH tiene ante sí la tarea de oficializar la separación de estos congresistas.

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«Sed de poder»

A criterio de un reconocido analista que al ser consultados por Diario Tiempo pidió el anonimato, la crisis del PSH tiene mas bien que ver con una lucha de poder y una «pelea de imagen».

Según el analista, el «desequilibrio» en el PSH comenzó cuando Redondo se sentó como presidente del Legislativo y se desvinculó de la ideología del PSH. «El principal problema ha sido la relación de Redondo con Nasralla, siempre tuvieron como fundamento la amistad, pero el poder rompe amistades. Entonces, Redondo cuando tuvo enfrente la opción real de poder, desapareció y terminó su amistad», analizó.

La unilateralidad y las arbitrariedades de Luis Redondo, sin duda, han significado una losa muy pesada para el PSH. Un partido que sigue aferrándose a la figura de Salvador Nasralla para sostenerse y continuar ejerciendo como contrapeso en el Congreso Nacional.

Sin embargo, las rupturas internas pueden pasarle factura de cara a los comicios generales, donde Nasralla volvería a ser su candidato, aunque sin concretarse aún si lo hará de forma independiente o conformando una alianza con los otros partidos de la oposición con los que ha venido haciendo frente en el Legislativo.