REDACCIÓN. Todo el mundo esta en la búsqueda de perder peso y mantener una forma corporal hermosa, sin embargo, no todos pueden lograr este objetivo con éxito y hablar con orgullo de ello.
De acuerdo con algunas estadísticas, solo 1 de cada 100 personas pueden hacer realidad el sueño de perder peso para siempre, mientras que el resto sigue luchando.
Pero hay algunos secretos útiles que pueden terminar con el sufrimiento y ayudar a alcanzar la meta mucho más fácil.
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Ser constantes
Una de las formas más inteligentes es ser consistente.
De hecho, este elemento es un factor clave que ayudará a lograr el objetivo rápidamente y también a deshacerse de los kilos de más con facilidad y eficacia. Por ejemplo, si la personas es amante de la comida rápida, definitivamente resulta difícil cortar todos esos alimentos con queso a la vez y no es una buena idea hacerlo.
La mejor solución es reducir la ingesta diaria e intentar incluir progresivamente verduras y frutas saludables en la dieta diaria. De esta manera, se evita someterse a un gran estrés y presión que podrían causar problemas de salud debilitantes. Sin embargo, siempre es importante mantenerse en movimiento y, paso a paso, la batalla por la pérdida de peso parecerá menos tediosa y mucho más entretenida.
Dar seguimiento a el progreso
Es muy importante hacer un seguimiento del progreso y monitorearlo cuidadosamente. Este paso ayuda a mantenerse motivado y alienta a hacer más esfuerzos para llegar a la meta.
Sin embargo, no hay que olvidar que los cambios no se producen de la noche a la mañana y el cuerpo no reacciona al nuevo estilo de vida saludable desde el primer día; pero sí llevará meses exhibir cambios notorios. Por lo tanto, ser pacientes, siempre mantenerse en movimiento y, finalmente, nunca olvidarse de llevar un registro de todos los cambios que ocurren.
Estar físicamente activo
Las personas creen que solo comer una dieta sana y equilibrada es todo lo que necesitan para perder peso, están muy equivocadas.
En efecto, una dieta sana y rica puede hacer que el proceso de perder peso sea más fácil, pero nunca podrá alcanzar resultados satisfactorios a menos que combine la buena nutrición con ejercicios físicos regulares.
Usualmente todos ponen la excusa de estar demasiado ocupado para ir al gimnasio; pero hay muchos ejercicios simples que se pueden hacer diariamente, como caminar al trabajo o montar en bicicleta, que ayudan a la perdida fácil y lograr algunos resultados notables.
Buscar apoyo en amigos o familiares
Estar en una dieta definitivamente no es fácil, el mejor apoyo es el que proviene de amigos y familiares. Para apoyar en esta difícil batalla, pueden hacer recordatorios para tener cuidado con la ingesta de calorías.
Determinar el tipo de metabolismo
Algunas personas pueden pasar meses sacando lo mejor de sí en el gimnasio y seguir hábitos alimenticios saludables, pero aún así, no están produciendo cambios. Por lo tanto, terminan frustrados, decepcionados, e incluso eligen bajar la guardia y abandonar la pelea.
Es importante saber que las personas tienen un metabolismo diferente y las de un metabolismo lento tienen que ser realmente pacientes, porque en tales casos los cambios solo se producen a largo plazo.
No obstante, es de suma importancia aprender acerca del propio metabolismo para saber cuándo esperar.
Aunque, se puede acelerar el metabolismo aumentando regularmente su consumo de agua y también algunos tipos específicos de frutas y verduras.
Supervisón de la dieta
Uno de los mejores consejos es buscar un experto, para que brinde consejos útiles y la supervisión necesaria.
Siempre hay que tener en mente que no todo lo que funciona con un amigo puede tener el mismo resultado en otra persona.
La salud es la mayor riqueza y si se pierde, se pierde todo. Entonces, en lugar de perder el tiempo probando diferentes programas de dieta, es mejor consultar a un nutricionista y ver cuáles son los nutrientes esenciales que tanto el cerebro como el cuerpo necesitan para funcionar correctamente.
Lista de alimentos que se consideran muy saludables y los mejores para bajar de peso: huevos enteros, verduras de hoja verde, salmón, ajo, pechuga de pollo o carne magra, atún, legumbres y frijoles.
