CORTÉS, HONDURAS. Entre lágrimas y tristeza se realizó ayer, viernes, la cristiana sepultura de los cuatro integrantes de la familia Discua, que murieron tras ser arrastrados por la corriente de una quebrada en San Francisco de Yojoa.
Los restos del profesor Raúl Discua Donaire, su esposa Elsa Suyapa Cardona y sus dos hijas Estefany Mariela Discua Cardona y Magaly Mariela Discua Cardona, los trasladaron hasta el cementerio de la aldea Tapiquilares.
Además, se conoció que los cuatro fueron sepultados en una sola fosa. Vecinos, compañeros y demás pobladores acompañaron a la familia en el momento tan duro.
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«Qué tragedia tan triste. Dios reciba a nuestro compañero maestro, su esposa y sus hijas en su santa gloria. Mis condolencias a toda su familia», manifestó una persona que estaba en el lugar.
«Que Dios bendiga a sus familias y que les dé fortaleza solo Dios puede darla que pesar la pérdida de una buena familia», precisó alguien más.
Tragedia en San Francisco de Yojoa
La familia Discua iba de regreso a su casa luego de visitar a unos parientes, pero jamás imaginaron que se encontrarían con un potente caudal que los arrastró provocándoles la muerte.
Ocurrió la noche del miércoles 14 de septiembre, cuando volvían a su residencia, pero en el camino hallaron un tramo totalmente cubierto por el agua.
Pese al riesgo que implicaba, se atrevieron a cruzar en su pick-up, pero fue imposible porque la corriente arrastró el automotor hasta una alcantarilla.
El agua obligó a los cuatro miembros de la familia a salir del vehículo y fue en ese momento que la corriente empezó a llevárselos.
Otros familiares, al notar que ellos no volvían, los reportaron como desaparecidos. Fue hasta ayer, viernes 16 de septiembre, que encontraron los cuatro cuerpos en los potreros aledaños a la carretera.
Una gran corriente de agua
De acuerdo con lo mencionado por Omar Rivera, coordinador municipal de la Comisión Permanente de Contingencias (COPECO), siempre que hay lluvias en esa zona se forma una fuerte corriente de agua.
«Se unen varios caudales que vienen desde la montaña y toda la carretera se convierte en un río con fuerte crecida. Además, estamos en alerta verde y amarilla desde la semana pasada», explicó.
Rivera contó que la corriente arrastró los cuerpos unos 8 kilómetros. El primer cadáver lo hallaron exactamente a las 6:30 de la mañana. Posteriormente, encontraron los otros tres.
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