TEGUCIGALPA, HONDURAS. – Para miles de hondureños culminar una carrera universitaria y obtener su título académico se vuelve un camino largo y lleno de obstáculos que hace casi imposible lograr el objetivo, pero hay un catracho ejemplar que no solo tiene uno sino seis.
Se trata de don Julio César Martínez Chávez, un ejemplo vivo de perseverancia debido a que actualmente es el catracho con más títulos de educación superior en el país. Él posee específicamente seis diplomas: cuatro licenciaturas, un máster y un Ph.D (doctorado).
Pese a que sus padres no tuvieron la oportunidad de estudiar siempre lo apoyaron a seguir adelante hasta culminar su sexta carrera profesional.
Para el destacado académico tener seis títulos de educación superior no lo vuelven un genio, pues asegura que la motivación para estudiar se basó en las fortalezas que Dios le dio y la inspiración que encontró en personas importantes para él.
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Dotes en el estudio
Don Julio desde pequeño mostró sus dotes en el estudio al graduarse con excelencia académica de la Escuela Inmaculada Concepción. Él nació en Comayagüela, municipio del Distrito Central, en 1966. Su padre es de oficio mecánico y su madre una ama de casa, quienes afortunadamente todavía viven bajo su cuidado.
El hondureño relató a Diario Tiempo que proviene de una familia luchadora y dijo que sus padres ni siquiera terminaron la primaria. Su papá llegó hasta el quinto grado mientras que su madre apenas y alcanzó el segundo grado de escolaridad.
No obstante, don Julio aseguró que sus progenitores son su ejemplo para él porque lo formaron con principios como la ética, el profesionalismo y la honradez para desempeñarse en la vida diaria.
Su sueño de profesionalizarse
El académico contó que su sueño de profesionalizarse surgió de dos puntos principales: El principal es el análisis de las fortalezas y debilidades y el segundo en las personas que lo pueden inspirar a seguir determinado rumbo.
Sus estudios secundarios los realizó en el Instituto Salesiano San Miguel que se caracteriza por entregar al país prestigiosos bachilleres en Ciencias y Letras, que destacan en las universidades a nivel nacional y en el extranjero en materias como la física, matemáticas y química.
«Cuando yo me gradué de Bachiller fue cuando adquirí estas fortalezas y me hice experto en cálculo, matemáticas generales, matrices, física y química. Eso de alguna manera me motivó a estudiar mi primera carrera universitaria que fue Ingeniería Industrial, entré en 1984 y me logré graduar en 1991”, expuso.
«Posteriormente, continuando con mi formación profesional y con base en las fortalezas que tenía en ese momento estudié la Licenciatura en Matemáticas al mismo tiempo que Ingeniería Industrial en la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán», continuó diciendo.
Luego, don Julio explica que inició a estudiar una maestría en Ingeniería de Negocios, siempre aprovechando sus fortalezas en matemática y su experiencia en la vida empresarial. Actualmente acumula 30 años de experiencia laboral en la empresa privada.
«Mi vocación de ayuda al prójimo es cuestión de empatía. Es triste ver la realidad de algunos compatriotas que no tienen a nadie que les ayude».
Derecho y Periodismo
Seguidamente agregó al culminar en 2009 la maestría en Ingeniería en Negocios, en 2012 decidió estudiar Derecho por el primo de su esposa, graduándose en 2016. “Terminando 2016 sentía aún la necesidad de estudiar y fue ahí cuando adquirí un doctorado en Ingeniera de Negocios en la Unitec», recordó.
«Ya estando en mi doctorado, me motivé a estudiar la carrera de Periodismo con la idea inicial de fortalecer mi gramática y ortografía, pero al mismo tiempo ya tenía la inspiración del periodista, Fredy Guzmán», contó don Julio.
De acuerdo con el catracho, su objetivo es servir de motivación a jóvenes, adultos y personas con experiencia laboral en seguir adelante con sus metas.
«El estudio y la obtención de conocimiento es un camino que culmina hasta que uno ya parte de este mundo material», aseveró el entrevistado.
De igual forma, dijo que Dios lo bendijo con esa energía de joven para estudiar esas carreras casi al mismo tiempo.
Retos y facetas
Según don Julio, los principales retos de alcanzar sus seis títulos profesionales fue el tratar de combinar su trabajo con el estudio y la vida familiar.
En la actualidad don Julio está felizmente casado con Dilia Marilú Fernández, una enfermera que trabaja en el Hospital Escuela. Ella también estudia y su desempeño hará que en 2023 obtenga su licenciatura en enfermería.
Con su pareja han procreado tres hijos que estudian la carrera de Medicina y que espera verlos graduado en el menor plazo.
«Los seres humanos pasamos diferentes facetas en la vida, las carreras que me sirvieron para crear mi patrimonio y ayudar económicamente a mi familia son la Ingeniería Industrial y mi Doctorado en Ingeniería en Negocios”, dijo.
No obstante, señala que “mis carreras favoritas son el Derecho y Periodismo. A través del Derecho puedo ayudar a las personas contra las injusticias que se cometen en el país en detrimento del pobre. Mientras que, por Periodismo puedo informar objetivamente sobre los problemas sociales que enfrenta Honduras», contextualizó don Julio.
Durante dos años, el hondureño ejerció el derecho. Defendió a madres solteras en casos de violencia doméstica, maltrato familiar, entre otras áreas como lo contencioso administrativo, laboral y penal. Ahora, su expectativa es ejercer el periodismo como director de noticias en algún medio local.
«Mi vocación de ayuda al prójimo es cuestión de empatía, porque es triste ver la realidad de algunos compatriotas que no tienen a nadie que les ayude. Soy una persona aplicada, perseverante, planificadora, pero no me considero genio ni más inteligente que las demás personas», finalizó diciendo don Julio.
Frase:
«He tratado de programar mi tiempo. Cuando salía de mi trabajo sacrificaba mi tiempo en la noche, esas eran las mayores horas de estudio. Tengo un plan a mediano plazo de estudiar una séptima carrera. Creo que culminaría mi vida profesional estudiando ya sea filosofía o sociología»: Julio César Martínez, catracho ejemplar.
El dato: En Honduras aproximadamente solo dos de cada diez jóvenes acceden a la educación universitaria.
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