Tegucigalpa, Honduras.- Luego de que las conversaciones de conciliación entre el gobierno estadounidense y los demandantes en una ampliación del Estatus de Protección Temporal (TPS) fracasaran, unos 250,000 migrantes correrían el riesgo de deportados de ese país, entre ellos muchos hondureños.
Esto ha generado preocupación en las organizaciones de migrantes hondureños, entre ellos la fundación 15 de Septiembre, que dirige Juan Flores.
Flores explicó que esta situación ya estaba sobre avisada, porque el TPS ya se había cancelado en 2017, perjudicando a más de 14 países.
«El problema está en que una vez que se canceló el TPS en 2017 introdujeron una demanda con el secretario de seguridad interna en aquel entonces, y hoy la Corte del Distrito 9 de Los Angeles todavía no ha determinado qué ha pasado con esa demanda. Mientras el TPS sigue vigente hasta el 31 de diciembre de este año», explicó.
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Beneficios del TPS
Sin embargo, Flores también mencionó que no se sabe a ciencia cierta las negociaciones abordadas por grupos demandantes. «Por esta razón es que hemos venido exigiéndole al gobierno de Honduras que busquemos la resolución de un nuevo TPS, para que podamos cubrir a 57 mil hondureños que quedarían en un limbo el 31 de diciembre», dijo.
En ese sentido, detalló que un nuevo TPS beneficiaría a más de un millón de hondureños que nunca han recibido un beneficio migratorio.
No obstante, mencionó que las peticiones realizadas «no tienen eco» ante las autoridades de Cancillería. «Eso nos demuestra que no tienen interés en que los migrantes en Estados Unidos tengamos protección migratoria», lamentó.
Flores, además, explicó que al no ser tomados en cuenta, queda al descubierto que Honduras ante Estados Unidos no quiere asumir un compromiso, porque «para bien o para mal este tema del TPS es un tema que se ha politizado en ambas vías».
Por otro lado, manifestó que las enfrentamientos entre los gobiernos de Honduras y Estados Unidos están perjudicando a la comunidad migrante.
«El tema no les interesa porque ellos ya están empoderados, a ellos no les interesa migrar y no tienen la necesidad de recibir una remesa«, comentó.
Seguidamente, lamentó el trato que reciben como hondureños en el extranjero, ya que un nuevo TPS es una gran oportunidad y se está desperdiciando.
Nuevo TPS
Por otro lado, Flores detalló que si no se llega a una resolución sobre la solicitud de un nuevo TPS, los migrantes continuarán en la sombras, en angustia y soledad.
«Un nuevo TPS nos daría la oportunidad de tener un permiso especial de trabajo dentro de Estados unidos. Asimismo, un permiso para viajar e ir a abrazar a nuestros familiares».
Finalmente, solicitó al gobierno no dejarlos solos ya que tanto ellos como la empresa privada se lucran de las remesas. «Además, le pedimos ayuda a la clase política y sociedad civil que nos ayuden a levantar la vos», finalizó.
