Como si no fuera poco las selfies que algunos suben con animales muertos o sobre suicidios, los jóvenes implementan nuevas prácticas crueles. Una joven en Estados Unidos causó indignación por matar a una tortuga bebé.
Jonasia Simpson, una joven de 15 años de edad, residente en Boston fue la autora intelectual y material del hecho. La adolescente publicó una fotografía de su pequeña mascota.
Acto seguido agregó el mensaje: «Poniendo mi tortuga en el microondas»; era apenas una pequeña. A pesar de que ella creyó que obtendría fama y comentarios a favor, erró.
Sus amigos cercanos y conocidos que la tenían en Facebook empezaron a manifestarse en contra de la acción. Asimismo, la publicación fue compartida masivamente.
Puesto que en la misma iba adjuntada la otra fotografía donde el reptil aparece muerto. Al someterse a altas temperaturas, explotó.
Muchas personas empezaron a declararse en contra de sus actos y ella tuvo que cerrar su cuenta de Facebook. Sin embargo, las capturas estaban hechas y se creó una petición en línea para que la policía de esa ciudad investigara el hecho.
La petición dice:
«Temprano esta semana, alrededor o el día 17 de mayo de 2017, una mujer joven (de unos 15 años de edad) de nombre Jonasia Simpson puso la tortuga de su familia en un microondas, matángola cruel e inhumanamente sin ninguna otra razón que por porque estaba aburrida. Su madre, Shanitha Blocker fue consciente del hecho atroz y horrendo, en vez de tomar acciones o disciplinar su hija, ella se rió y apoyó las acciones de su hija».
«Jonasia no solo mató a la mascota de la familia y su madre no solo apoyó sus acciones; ellas han mostrado completa indiferencia sobre la vida y el bien de todos los animales. Cargos por crueldad animal deberían caer sobre ellas dos y deben ser encarceladas o en el caso menor de quedar exentas de la ley, poder asegurarse de que ellas no tengan la oportunidad de matar o herir otro animal inocente».