TEGUCIGALPA, HONDURAS. La actriz estadounidense Jennifer Aniston invierte 200.000 libras (USD 247.000) al año en terapia, yoga, tratamiento láser para reafirmar la piel e incluso clases de actuación.
A Aniston solían decirle «pobre Jen» debido al triángulo amoroso que protagonizó junto a Brad Pitt y Angelina Jolie hace una década y, por lo que se divorció del actor.
A sus 50 años, parece que se encuentra en su mejor momento, gracias a los miles de dólares que invierte en su salud física y mental.
La frase «el que ríe al último ríe mejor» podría aplicarse muy bien a la supuesta batalla que habría tenido con Jolie después de que ésta se casara con Pitt.
Cabe mencionar que, trabajar con los instructores más famosos de Los Ángeles cuesta unas 3,200 libras al mes (casi USD 4,000), en productos para el rostro puede gastar unas 1,300 libras (USD 1,600).
Según se conoció, la actriz gasta mucho más en ropa y viajes. Sumado a esto, hace meditaciones diarias y terapia regular que le permite sobrellevar la muerte de su madre, Nancy Dow, ocurrida en 2016.
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Icono de Hollywood
Una persona de su círculo intimo aseguró que ella no está buscando la «felicidad», sino su bienestar. «Es un verdadero icono de Hollywood. No creo que haya una actriz que se vea mejor que ella a los 50″, dijo la fuente.
«¿Quién habría pensado que Jen se vería mejor que Angelina Jolie? Eso demuestra que en la vida no es cómo empiezas sino cómo terminas. Estoy muy feliz por ella», declaró un amigo cercano de Aniston a Halperin.
Por otra parte, se reveló que la actriz y su madre no tenían una muy buena relación e incluso se decía que ella la «castigaba» por no haber sido «lo suficientemente atractiva». Esto explicaría por qué ella se somete a tan estrictas rutinas para mejorar y mantener su imagen.