Redacción. El comandante de la Policía Militar del Orden Público (PMOP), Fernando Ramiro Muñoz, informó que en las próximas semanas tres centros penales serán cerrados debido a que se encuentran en condiciones deplorables.
Según Muñoz, otro de los factores que también intervienen desde hace tiempo es la sobrepoblación, por lo que las autoridades ya no deben contar con esas cárceles y la mejor decisión será cerrarlos y trasladar a los reos a otras penitenciarías.
«Hay unos centros que son preocupantes, datan desde el año 1800, como el de La Esperanza, Trujillo, Cortés, esos centros penales tienen que salir de ahí», explicó.
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«Es ridículo»: Jefe de PMOP niega que haya llamadas extorsivas desde cárceles
Por otra parte, a finales del 2023, Ramiro Muñoz tildó de «ridículo» que organizaciones señalen que aún siguen saliendo llamadas extorsivas desde los centros penales del país, por lo que les pidió prudencia y congruencia al momento de dar una información.
Y es que, según un informe presentado este martes por la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), denominado «Evaluando un año de lucha contra la extorsión: avances y desafíos», la extorsión en Honduras ha incrementado desde los centros penales. Inclusive, desde las mismas cárceles se está descontrolando el tema de las llamadas satelitales.
No obstante, el coronel Ramiro Muñoz aseguró que no es así, ya que el trabajo en los centros penales se está haciendo «de la mejor manera». También exhorta a la población que en caso de recibir una llamada desde una cárcel «se lo hagan saber».
«Una ridiculez»
Respecto a las llamadas, Muñoz cuestionó sobre la manera de cómo (ellos) detectan una llamada satelital, pues lo ve como algo imposible.
«Yo le pediría a las personas que dijeron esto, ¿cómo detectaron una llamada satelital?, ¿cómo lo hicieron? (…) eso quisiera saber», dijo.
Respecto al supuesto aumento de la extorsión desde los centros penales, respetó la opinión de la organización; sin embargo, lo calificó como una ridiculez, debido a que se han decomisado más de tres mil teléfonos celulares, desconectado routers, comunicaciones y hasta antenas, en las diferentes cárceles del país.
«Creo que debemos de ser más prudentes con esto, y cuando demos una información debe ser los más congruente», cerró.
